Las víctimas eran tentadas a mantener relaciones sexuales con mayores a cambio de dinero, promesas de ascenso de división y mercancías como indumentaria o calzado deportivo, según la investigación de la fiscal Garibaldi.
River Plate quedó involucrado en denuncias de abuso sexual de juveniles en el fútbol argentino, escándalo que envuelve a Independiente y Temperley, informaron fuentes judiciales y una Organización No Gubernamental (Ong).
“Una médica cirujana tuvo conocimiento de que hubo abusos de menores que vivían en la pensión del club River”, dijo Andrés Bonicalzi, abogado de la Asociación de Víctimas de Violación (Avivi), en rueda de prensa.
La denuncia fue presentada en la Policía de la Ciudad de Buenos Aires, por presunto abuso sexual de jugadores juveniles entre 2004 y 2011, señalaron fuentes judiciales citadas por canales de TV y portales web de la prensa local. “La médica fue despedida sin motivos”, precisó Bonicalzi.
La investigación abarcaba por ahora a Independiente, club de primera división que había presentado la denuncia judicial al conocer un testimonio de un joven de 19 años a un psicólogo de la pensión de jugadores de los ‘diablos rojos’.
“La estructura de esta red de prostitución de menores no funcionaba solo en Independiente. Hay otros clubes”, había declarado la semana pasada la fiscal que encabeza la investigación, María Soledad Garibaldi.
La segunda entidad puesta bajo investigación fue Temperley. En River, tercera institución denunciada, uno de los tres casos “se refiere a una chica de los equipos de voleibol y las otras dos al fútbol”, indicó Bonicalzi.
“Veníamos investigando versiones de familias del interior (provincias) cuyos hijos serían víctimas de una red de pedofilia”, dijo Bonicalzi.
La médica cirujana, cuyo nombre fue resguardado, tomó conocimiento de los casos por testimonios que recibió “de un psicólogo del club que habló con los menores”, dijo el abogado de Avivi. El psicólogo también fue apartado del club, según la Ong.
Por los casos que atiende la fiscal Garibaldi, hay seis personas detenidas, entre ellas el árbitro Martín Bustos, un relacionista público y un organizador de torneos de juveniles, según las fuentes.
“La médica solicitó un botón antipánico policial en su casa porque está asustada a causa de posibles amenazas”, afirmó Bonicalzi.
Las víctimas eran tentadas a mantener relaciones sexuales con mayores a cambio de dinero, promesas de ascenso de división y mercancías como indumentaria o calzado deportivo, según la investigación de la fiscal Garibaldi.
© Agence France-Presse