El astro luso acrecentaba aún más su leyenda este miércoles alcanzando con este triplete 88 goles en 157 partidos internacionales con su selección y ahora, con el título de mejor jugador del partido en el bolsillo, esperará en la final a su próximo rival.
Portugal se convirtió este miércoles en el primer finalista de la nueva Liga de Naciones al imponerse 3-1 a Suiza, impulsado por un triplete de su héroe Cristiano Ronaldo en el estadio Do Dragao de Oporto.
Cristiano transformó un golpe franco desde la frontal para abrir el marcador (25), antes de que Ricardo Rodriguez empatara con un controvertido penal (56), pitado con ayuda del videoarbitraje (VAR).
Volvió entonces a aparecer Cristiano para hacer el 2-1 (88) y repetir dos minutos después (90) poniendo el definitivo 3-1 y meter a su selección en una final, donde espera al ganador del encuentro que jugarán el jueves en Guimaraes Inglaterra y Holanda.
El triplete de Cristiano dejó en el olvido el polémico penal pitado por un pequeño contacto de Nelson Semedo sobre el suizo Steven Zuber en el área portuguesa, que el árbitro concedió tras la revisión del VAR, anulando como consecuencia otro penal que había acabado de pitar en la jugada siguiente a favor de Portugal.
Hasta ese momento, Portugal dominaba pero sufría para encontrar los huecos en la granítica formación helvética.
Bien cerrados atrás, los suizos esperaban su oportunidad para salir al contraataque, poniendo a prueba la defensa portuguesa y al portero Rui Patricio.
El meta apenas tuvo tiempo de calentar cuando en el minuto 3 tuvo que echarse a los pies de Xherdan Shaqiri para evitar que rematara a gol.
Cristiano Ronaldo respondió con una internada en el área contraria, pero su disparo se fue desviado (12).
Portugal tenía el dominio de la pelota, pero las imprecisiones lastraban su juego frente a una Suiza que parecía llevar peligro cada vez que alcanzaba el área local.
El delantero suizo Haris Seferovic, máximo goleador de la liga portuguesa con el Benfica, dio el susto a los aficionados locales con un remate de cabeza en boca de gol que atajó Rui Patricio (18).
Apareció entonces Cristiano Ronaldo para marcar transformando un golpe franco desde la frontal que se coló ajustado al palo más alejado del portero (25).
Cristiano, que no había vuelto a marcar de falta con su selección desde el encuentro contra España en el Mundial de Rusia (3-3), daba tranquilidad a su equipo con la ventaja.
Camino del descanso Seferovic soltó un disparo en el área que repelió el larguero (42) y Portugal estuvo a punto de aumentar su cuenta cuando el joven Joao Félix recibió un pase en boca de gol que envió a las nubes (45).
Tras la pausa, Cristiano volvió a probar suerte con un disparo desde la frontal que se fue desviado (50).
Y entonces el partido se rompió cuando el árbitro alemán Félix Brych fue a revisar al VAR una jugada anterior en el área portuguesa, nada más pitar un penal sobre Bernardo Silva contra Suiza, concediendo la pena máxima a Suiza y anulando la favorable a Portugal.
Ricardo Rodriguez transformó el penal poniendo el empate en el marcador (56).
El partido entró entonces en un intercambio de golpes con constantes idas y venidas, pero sin goles hasta que Cristiano remató un centro desde la derecha de Bernardo Silva para hacer el 2-1 (88).
El gol fue un mazazo para los suizos, que bajaron los brazos y vieron cómo dos minutos después Cristiano volvía a recortar el área para hacer el 3-1 definitivo (90).
El astro luso acrecentaba aún más su leyenda este miércoles alcanzando con este triplete 88 goles en 157 partidos internacionales con su selección y ahora, con el título de mejor jugador del partido en el bolsillo, esperará en la final a su próximo rival.
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