Por estas razones autoridades incineran aeronaves abandonadas en pistas clandestinas
Autoridades informan del por qué luego de las diligencias queman aeronaves que son localizadas abandonadas en pistas clandestinas y que transportan ilícitos.
El lunes 16 de diciembre, la Policía Nacional Civil (PNC) publicó de que agentes antinarcóticos apoyaron a la Fiscalía de Narcoactividad del Ministerio Público (MP) en la destrucción de una avioneta localizada en El Estor, Izabal.
Le puede interesar
Jefe edil de Nueva Concepción es ligado a proceso penal por vínculos con el narcotráfico
El MP informó que esta destrucción se efectúa cuando los peritajes realizados por expertos durante el procesamiento determinan que la aeronave no está en condiciones de ser utilizada.
La incineración se hace cuando ya se han hecho todas las diligencias necesarias para la investigación.
Aunque se aclara que este procedimiento de incineración se hace con las aeronaves que son halladas abandonadas y que no fueron destruidas por estructuras criminales.
La Dirección General de Prensa del Ministerio de la Defensa informó que cuando las aeronaves aparecen incineradas es porque el crimen organizado las utilizó para el trasiego de droga y no quiere dejar evidencia de dónde viene y hacia a dónde va el ilícito.
Carecen de piezas
Agregó que estas avionetas o jets abandonados y que no han sido quemados, carecen de piezas claves que les han sido quitadas por los malhechores y por eso no se pueden usar.
Añadió que reparar una aeronave que le faltan instrumentos para la navegación aérea representa mucho dinero, por lo que estas se destruyen por una orden judicial.
Si los aparatos estuvieran en buen estado, sería una opción para pasarlas a extinción de dominio.
La PNC se limitó a decir que la destrucción de las aeronaves es por solicitud del MP.
Con las aeronaves halladas en los últimos días, suman 50 casos en lo que va del 2019.
Últimos hallazgos
El domingo 15 de diciembre, cuatro vuelos ilegales fueron detectados por los radares de la Fuerza Aérea de Guatemala, de los cuales dos fueron localizados en áreas de Quiché e Izabal.
La primera avioneta fue localizada en Ixcán, Quiché, donde un grupo de vecinos y personas armadas bloquearon el paso hacia el área donde se registró el aterrizaje.
La segunda avioneta fue hallada en un área de Izabal, donde soldados resguardaron el área. La tercera avioneta fue hallada en una pista clandestina ubicada en San Luis, Petén.