Los atentados de París mantiene alerta máxima
Los cafés de París abren sus puertas pero lo ocurrido en el 2015 permanece en la memoria.
Los clientes comienzan a regresar un año después de la tragedia que dejó 130 muertos en la capital francesa.
39 de estas victimas murieron en bares y restaurantes al aire libre en el centro de la ciudad.
Los seis cafés y restaurantes que fueron el objetivo de los yihadistas reabrieron.
Y el domingo, a un año de los ataques, develarán placas con los nombres de las víctimas en sus vitrinas.
Los ataques del 13 de noviembre en el Bataclán y el estadio de Francia dejaron a los residentes con miedo.
Y no solo los franceses se sienten de esa manera.
París registró dos millones menos de turistas los primeros ocho meses de este año en comparación con 2015.
A pesar del miedo la capital sigue con su bullicio habitual, pero nadie olvida lo que ocurrió hace un año.
Luego de los atentados la vigilancia 24 horas, ‘imposible’
Según el fiscal federal, por el momento es imposible fijar una fecha para juzgar ambos casos.
Existen “bastantes zonas oscuras en el caso del 22 de marzo”, puso como ejemplo.
Desde hace meses, los investigadores se interrogan sobre la identidad de un hombre apodado Abu Ahmad.
En realidad, este hombre podría ser Oussama Atar, quien “es el único coordinador en Siria en haber sido identificado por el momento”, precisó el martes a la AFP una fuente próxima a la investigación.
Después de haber sido arrestado en Irak, en 2004 tras la invasión estadounidense, pasó un tiempo en varias cárceles, entre ellas la prisión de Abu Ghraib, que fue utilizada por las fuerzas norteamericanas.
Tras su liberación en 2012 regresó a Bélgica, antes de partir de nuevo a Irak y Siria, aunque los servicios secretos perdieron su rastro hace varios meses.