Un grupo de científicos españoles trabaja codo a codo con expertos de la NASA para reutilizar los desechos líquidos de los astronautas, pensando en misiones espaciales de largo aliento.
La NASA siempre está buscando tecnologías que permitan reutilizarlo todo, y para ello incluso tiene un programa específico: NASA Vision for Space Exploration, que se dedica al desarrollo de fuentes de poder compactas, eficientes y confiables que permitan sobrevivir a misiones tripuladas que puedan ser enviadas a la Luna o, eventuamente dice su sitio web, también a Marte. El plan es que estos astronautas tengan “oportunidades reales de retornar” a la Tierra.
Y pensando precisamente en satisfacer esas necesidades, esenciales si algún día queremos realmente conquistar el espacio, el Instituto de Electroquímica de la Universidad de Alicante, en España, está trabajando en conseguir sacar algo provechoso de la orina. Algo provechoso como generar agua y, quizás, energía para alimentar los instrumentos a bordo de las naves espaciales. Para ello desarrolló un catalizador que logra obtener agua del pipí o pis de los astronautas, adminículo que ya ha sido probado con éxito en condiciones de microgravedad.
La participación española en el estudio ha sido de vital importancia. Investigadores de la citada Universidad de Alicante desarrollaron nanomateriales que son empleados como electrocatalizadores. Estos son incorporados a un dispositivo electroquímico más pequeño que una caja de zapatos diseñado por expertos de la Universidad de Puerto Rico Río Piedras, que también trabaja directamente con la NASA.
La Universidad de Alicante viaja con la NASA al espacio para recuperar agua y producir energía a partir de materia de desecho https://t.co/qW4q8CWtEJ
— Nova Ciencia (@Nova_Ciencia) September 28, 2020
El catalizador será enviado a la Estación Espacial Internacional (ISS) desde Virginia (Estados Unidos) este martes 29 de septiembre, para realizar experimentos y ver si funciona la purificación de la orina en el espacio. Lo que quieren saber los expertos es cómo rinde el dispositivo expuesto a condiciones de ingravidez durante largos períodos de tiempo.
El químico José Solla Gullón aseguró que si los resultados son satisfactorios, se fabricará un prototipo que será integrado en el sistema de reciclaje de la orina de los astronautas en la Estación Espacial Internacional, para generar agua y energía. El científico recalcó que esto es muy importante para misiones largas o permanencias prolongadas en el espacio.
“Es un orgullo poder llevar el conocimiento generado y desarrollado en la Universidad de Alicante a la Estación Espacial Internacional”, destacó Solla Gullón, quien ha señalado que este proyecto de sus colegas de Puerto Rico está directamente financiado por la NASA dentro del programa PR NASA EPSCoR.