Finalizó la gran fiesta del deporte panamericano después de 19 días de acción, anécdotas, récords y actuaciones históricas que marcaron lo que fueron los juegos de Santiago 2023.
Cerca de 7.000 atletas se dieron cita en la capital chilena para competir en 40 deportes y 59 disciplinas con la mirada puesta en los Juegos Olímpicos de París del próximo año.
Más allá del dominio de Estados Unidos en el cómputo global de medallas, algo que ha logrado en cada una de las ediciones de los juegos con la excepción de La Habana en 1991, Santiago fue escenario de la mejor participación de muchas delegaciones que sumaron el mayor número de medallas de su historia.
Fue el caso de países como México, Colombia, Panamá y la propia Chile, aunque en el caso de los anfitriones no pudo alcanzar su mejor registro de medallas de oro pese a haber logrado 29 medallas más en total que la que había sido hasta ahora su mejor actuación.
En cuatro años la cita panamericana será en Barranquilla, pero antes de viajar a la costa caribeña colombiana te ofrecemos 5 historias que nos dejó Santiago 2023.
Con 1,3 millones de espectadores, según el comité organizador, Santiago pasó a ser una de las ediciones con mayor asistencia en la historia de los Juegos Panamericanos.
El total de público casi triplicó al que asistió a Lima hace cuatro años, que según los organizadores de ese evento contó con 517 mil personas.
La conexión de los juegos con el público chileno quedó reflejada el pasado sábado 4 de noviembre cuando 40 mil personas abarrotaron el estadio Nacional para ver la jornada de atletismo, 15 mil presenciaron las finales de voleibol y 20 mil estuvieron en el la final de fútbol masculino.
México se consolidó como la tercera potencia deportiva panamericana por detrás de Estados Unidos y Brasil al conseguir el mayor número de medallas de su historia: 142.
De ese total sumó el récord de 52 oros en una gran variedad de disciplinas, desde boxeo y clavados a pentatlón moderno y esgrima.
También celebró Colombia con 101 medallas en total, 29 de oros, confirmando su dominio en disciplinas como el levantamiento de pesas y ciclismo.
Mientras que Panamá alcanzó ocho medallas incluida la histórica de oro de Gianna Woodruff en los 400 metros con vallas.
Uno de los hechos curiosos que se dio durante los Juegos Panamericanos ocurrió en la final del fútbol femenino en el que se enfrentaron México y Chile.
La victoria fue para la selección mexicana con un gol de Rebeca Bernal, quien fue la única que pudo superar la resistencia en el arco de María José Urrutia.
Lo llamativo fue que Urrutia es delantera y se tuvo que poner los guantes debido a que las dos porteras chilenas tuvieron que abandonar la selección para regresar a jugar con sus clubes en el fútbol europeo por obligaciones contractuales.
Hubo muchos nombres propios que brillaron en la delegación anfitriona, pero la mayor celebración se vivió en la casa de la familia Abraham Schussler.
La razón es que los hermanos Melita, Antonia, Alfredo e Ignacio, cuatrillizos de 26 años, ganaron medalla de oro en las pruebas de remo sin timonel en femenino y masculino.
Además de la medalla de plata compitiendo juntos en Mixto 8+.
También hay que mencionar a Santiago Ford, el atleta de origen cubano que ganó la medalla de oro en decatlón y que protagonizó una de las imágenes de los juegos al cruzar la meta caminando.
“Esa llegada a la meta, cuando frené, no fue porque quise pararme sino porque me acordé cuando estaba caminando por el desierto a las 5 de la mañana, sin saber qué hacer pero con el objetivo claro que era llegar aquí. Esos últimos 10 metros fueron reflejo de la madrugada, deshidratado. Pero en mi corazón y en mi mente yo sabía lo que quería”, contó recordando cómo fue que llegó a Chile en 2018.
Otra de las figuras en Santiago fue Martina Weil, con su electrizante oro en los 400 metros planos y plata en el relevo 4×100.
Cuando la peruana Kimberly García cruzó la meta de los 20 kilómetros de marcha femenina todas las miradas quedaron fijadas en el cronómetro.
García había mejorado en cuatro minutos el récord mundial de la distancia, pero su tiempo tuvo que anulado junto al de las otras atletas participantes en la prueba.
La razón fue que por un error de la Asociación Panamericana de Atletismo el recorrido tenía unos tres kilómetros menos que el que debía ser.
Una decepción total.
“Quería hacer el récord panamericano y las chicas querían buscar, las que no tienen, marcas para los Juegos Olímpicos, pero todo está invalidado, entonces eso va a traer una molestia para todas”, aseguró García después de la prueba.
El único consuelo es que tanto ella como la ecuatoriana Glenda Morejón (plata) y la también peruana Evelyn Inga (bronce) obtuvieron sus medallas.