El cabello se ha convertido en un aspecto muy importante en lo que tiene que ver con la estética ya que, de una u otra forma, este nos ayuda a tener una mejor imagen y presentación.
Para muchas personas el lucir una melena abundante, brillante y larga se ha convertido en una ambición por la que tienen que luchar mediante la aplicación constante de varios tratamientos.
Sin embargo, debido a la constante exposición al sol, la contaminación y otros factores dañinos puede deteriorarse. Cada vez son más comunes losdaños capilares y el desarrollo de trastornos como la caída excesiva.
Este último es uno de los problemas más difíciles de tratar, pues aunque algunos productos logran reducirlo, casi siempre se requiere la intervención de un profesional.
Por fortuna, existen algunos remedios de origen natural cuyas propiedades favorecen su tratamiento para devolverle fuerza y vitalidad en menos tiempo.
Este es el caso del jugo de limón, un ingrediente valorado por sus utilidades medicinales, gastronómicas y estéticas.
El limón es uno de los frutos cítricos más extendidos y utilizados en todo el mundo. Es una fuente significativa de vitamina C, ácido fólico, vitamina B y minerales esenciales que apoyan cada una de las funciones del organismo.
Entre sus usos cosméticos cabe destacar que es muy bueno para el cabello, ya que además de regular el pH natural del cuero cabelludo, también contribuye a reducir la caída y lo limpia de células muertas.
Su aplicación regular previene trastornos comunes como la caspa y el debilitamiento de los folículos pilosos.
De forma adicional le proporciona brillo y control del frizz o encrespamiento, lo que, sin duda, es un gran apoyo para tener la melena deseada.
Este shampoo natural combina las propiedades del limón con la proteína y demás nutrientes del huevo para crear un champú natural con las cualidades para fortalecer el pelo de las raíces hasta las puntas.
Bate el huevo con la ayuda de un tenedor e incorpora poco a poco el zumo de un limón.
Sobre el cabello húmedo, extiende el champú con suaves masajes, asegurándote de llegar a todas las zonas.
Déjalo actuar entre 30 y 40 minutos y aclara con abundante agua.
Repite su aplicación mínimo dos veces a la semana.