Scarlett Johansson y Disney resuelven su pleito sobre “Black Widow”
La actriz estadounidense Scarlett Johansson llegó a un acuerdo con los estudios Disney para saldar su diferendo financiero por la película "Black Widow".
“Estoy feliz de haber resuelto nuestras diferencias con Disney”, informó Johansson en el breve comunicado.
El texto no revela números ni las condiciones del acuerdo.
Johansson demandó en julio a Disney por su decisión de estrenar la película de superhéroes Black Widow, que ella protagoniza, en streaming y cines al mismo tiempo, alegando un incumplimiento de contrato que le costó millones de dólares.
La actriz, una de las mejor pagadas de Hollywood, tenía derecho a un porcentaje de los ingresos de taquilla de la tan esperada película de Marvel, según la demanda que fue presentada ante un Tribunal Superior de Los Ángeles, California.
En el comunicado divulgado el jueves 30 de septiembre, Johansson afirma estar “increíblemente orgullosa” de su trabajo junto a Disney. “No veo la hora de continuar nuestra colaboración”, agregó.
Por su parte, el director de contenido de los estudios Disney, Alan Bergman, dijo estar “muy satisfecho” por el acuerdo.
“Apreciamos sus contribuciones al universo cinemático de Marvel y esperamos trabajar juntos en una serie de proyectos venideros, incluyendo la Torre de Terror de Disney”, dijo Bergman refiriéndose a la película inspirada en el parque temático de la compañía.
Black Widow debía estrenarse originalmente en la pantalla grande el año pasado, pero se retrasó varias veces debido a la pandemia y finalmente se presentó en julio en los cines y en la plataforma Disney+ de forma simultánea.
Los analistas de taquilla adjudicaron al debut en streaming el estreno mediocre de la película, para los estándares de Marvel.
Como muchos estudios de Hollywood, Disney prioriza cada vez más la transmisión en línea como una fuente de ingresos futuros.
Después del fin de semana de estreno de la película, Disney emitió un comunicado en el que afirmaba que Black Widow había ganado “más de US$60 millones” solo en Disney+, donde estaba disponible para los suscriptores a un costo adicional de US$30.