Si bien es cierto todas las relaciones de pareja pueden llegar a tener momentos difíciles, también hay una línea en la que puede considerarse cómo tóxica. ¿Pero cómo saber si tu relación ha llegado a tal punto de deterioro que es momento de dar vuelta a esa página?
Según Lillian Glass, psicóloga experta en el tema, una pareja puede definirse como tóxica cuando tiene “una relación en la que no hay apoyo del uno para el otro, en donde hay conflictos en los que se trata de lastimar al otro, en la que hay competición, en la que no hay respeto y además no existe conexión”.
Un informe de la revista Time agregó además que aunque es normal que una pareja tenga sus bajas, en una relación nociva los momentos negativos superan en número aquellas buenas experiencias.
En muchas ocasiones, los protagonistas de este tipo de relaciones no toman la atención necesaria a las situaciones que se presentan en su cotidianidad hasta que las cosas se salen de control, llegando en ciertos casos a generar agresiones.
Para la experta, la agresión, el abuso y la intimidación son señales inequívocas de que se tiene una relación tóxica, pero en algunas ocasiones los indicios son mucho más sutiles y difíciles de percibir.
El no tener un sentimiento de felicidad con la pareja y por el contrario sentirse triste, enojado, ansioso o resignado, en ocasiones puede llevar a cambios notables en la personalidad, lo que es una bandera roja para Glass, ya que este tipo de sentimientos pueden provocar enfermedades mentales como depresión, ansiedad y desordenes alimenticios.
La psicóloga también asegura que muchas veces los protagonistas de una relación dañina son los últimos en darse cuenta de esto. Razón por la cuál aconseja poner atención a los mensajes de preocupación de familiares y amigos, ya que estos se pueden convertir en la mejor señal de alerta de que algo no anda bien.