Los víveres que Lucy Sparrow ofrece en sus anaqueles tienen un ingrediente en común: fieltro. Son 31.000 piezas que esta artista británica expone en esta "celebración de las marcas" en Los Ángeles.
Los víveres que Lucy Sparrow ofrece en sus anaqueles tienen un ingrediente en común: fieltro.
Son 31.000 piezas que esta artista británica expone en esta “celebración de las marcas” en Los Ángeles.
Desde las más conocidas marcas de gaseosas, pasando por frijoles, galletas, salsa de tomate, detergente, hasta frutas y hortalizas: este supermercado, ubicado en la galería del Standard Hotel de Los Ángeles, está a reventar.
“Tomó un año” terminar las piezas, todas hechas a mano por Sparrow, una artista contemporánea de 32 años que trabaja principalmente con fieltro y lana para crear sus propias versiones de objetos existentes.
“No es en lo absoluto una crítica al consumismo, para nada. Es una celebración de las marcas y los sentimientos que tenemos con la familiaridad, es una celebración, celebración del diseño, del empaquetado, de los diseños fuertes”, dijo a la AFP.
“Son productos icónicos, con los que cualquiera está familiarizado, los productos con los que creciste, con los que tienes lazos emocionales y te llevan a un pasado de días más soleados y menos complicados”.
Es mucho del pasado, pero también del presente: Nutella, Oreo, Pringles, Lays, Doritos, Coca Cola, Evian, 7Up… todo disponible.
“Mirando todo esto me da sed y hambre, y me lo quiero comer todo”, expresó entre risas Joshua Umeda, uno de los visitantes a la exposición, que estará abierta hasta el 30 de agosto.
Hay botellas de alcohol de fieltro y hasta una revista para adultos.
Todas las piezas están a la venta. Decenas de personas llenan este supermercado artístico y en cestas o carritos van vaciando los anaqueles, que va arreglando la artista vestida con una camisa de “Sparrow Market”, como si fuera empleada de la tienda.
Eso sí, las piezas cuestan entre los 45 y 60 dólares, bastante más caras que los productos reales. Claro, es que es arte.
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