Robbie Williams reveló que una vez se le pidió que se uniera a Queen, pero se negó porque no sentía que pudiera llenar adecuadamente los zapatos del fallecido Freddie Mercury, a quien Williams considera "divino".
El incidente tuvo lugar en 2001, cuando Williams, quien había colocado sus primeros tres álbumes en solitario después de dejar Take That en el número 1 en las listas del Reino Unido, unió fuerzas con Queen para volver a grabar “We Are the Champions” para la banda sonora.