Cinco policías murieron en ataques sincronizados en dos provincias ecuatorianas que fueron atribuidos a grupos de narcotraficantes.
Una cárcel de Ecuador volvió a llenarse de sangre este lunes.
Jeremy dormía en una habitación que miraba hacia la Calle 8, donde la música del bailadero más cercano se filtraba a través de las ventanas a las 3:00 de la mañana, como cualquier otra madrugada de domingo en el barrio Cristo del Consuelo, al sureste de Guayaquil.
Ecuador vive una intensa jornada criminal este martes 1 de noviembre. Atentados de organizaciones de narcotraficantes se cobraron la vida de cinco policías.
Los reclusos treparon a los techos mientras se escuchaban detonaciones, según imágenes de noticias de televisión, recoge la agencia AFP.
Guayaquil es la ciudad ecuatoriana con mayor cantidad de denuncias por extorsiones.