El parque del empobrecido Huixtla, en Chiapas, un estado fronterizo con Guatemala, así como su iglesia y la cancha de básquetbol se convirtieron en dormitorio comunal para unos 7.000 hondureños -según estimaciones de la ONU-, entre los que hay niños, mujeres embarazadas y ancianos que durmieron en su mayoría al ras del piso.
Miles de migrantes hondureños se disponen a seguir su camino a través de México rumbo a Estados Unidos, desafiando la advertencia del presidente Donald Trump de hacer todo para "detener la embestida" en la frontera sur.
Mildred Arellanos una joven de 19 años fue ingresada de emergencia al Hospital Regional de Zacapa debido a que presentaba fuertes dolores en el vientre después de haber caminado durante varias horas desde Chiquimula rumbo a Zacapa. La joven tenía dos meses de su primer embarazo.
El gobierno hondureño aseguró que dos de sus ciudadanos, que participaban en la caravana de migrantes que marcha por México rumbo a Estados Unidos, murieron y explicó que uno de los cadáver ya fue repatriado.