Amado Hernández llora por haberlo perdido todo, a la vez que agradece la solidaridad que le permite tener qué comer y con qué vestirse: es uno de los sobrevivientes de la tragedia del Volcán de Fuego que desde hace una semana viven en albergues en Guatemala.
Carlos Augusto Santizo trabaja seis meses, el resto del año está desempleado y deja de ganar los 400 dólares mensuales en las plantaciones de caña de azúcar que cubren la falda del volcán de Fuego, en el sur de Guatemala.
La constante actividad volcánica de la montaña de 3 mil 763 metros de altura, situada a 35 km al suroeste de la capital, pone en peligro las labores de rescate.
Las autoridades guatemaltecas suspendieron los rescates en San Miguel Los Lotes después de que el volcán de Fuego intensificara su actividad e intensas lluvias provocaran fuertes corrimientos de tierra, aunque no frenan a los vecinos en su intento de hallar a sus desaparecidos.
El Volcán de Fuego expulsa gas y columnas de ceniza a 5 mil metros sobre el nivel del mar, en una nueva etapa de actividad que podría arrojar ceniza en poblados cercanos.
Personal de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (CONRED) de Zacapa visitaron la comunidad de Sunzapote, Río Hondo, Zacapa para verificar 20 lotes que serán entregados a las familias que fueron afectadas el último domingo por el volcán de Fuego.