Una amenaza "real, seria y creciente". Con estas palabras se refirió este jueves el Comando Espacial de Estados Unidos sobre el ensayo atribuido a Rusia de un arma que podría ser utilizada para destruir satélites en el espacio.
El Comando Espacial “tiene pruebas de que Moscú realizó una prueba no destructiva de un arma antisatélite desde el espacio” el 15 de julio, según indicó el organismo en un comunicado.
#Russia recently conducted non-destructive #space-based #ASAT test. Russia released new object from #COSMOS2543, currently @SpaceTrackOrg Sat Cat No 45915. @SpaceForceCSO & international #partners are committed to #deter #defend #defeat space threats. https://t.co/kQtPMJEBnI
— U.S. Space Command (@US_SpaceCom) July 23, 2020
“La prueba de la semana pasada es un nuevo ejemplo de que las amenazas contra las instalaciones espaciales de Estados Unidos y sus aliados son reales, serias y crecientes”, añadió el Comando.
El ministro de Defensa de Rusia, Serguéi Shoigú, había dicho previamente que su país está usando nueva tecnología para llevar a cabo inspecciones de su equipamiento espacial.
Reino Unido se unió a Estados Unidos en lo que es la primera vez que hace acusaciones sobre disparos de prueba en el espacio por parte de Rusia.
El señalamiento de Reino Unido se produce días después de que un informe dijera que el gobierno británico “subestima de mala manera” la amenaza que supone Rusia.
En una declaración realizada este jueves, el subsecretario de Estado para Seguridad Internacional y No Proliferación de EE.UU., Christopher Ford, acusó a Moscú de hipocresía después de que dijera que quería que el control sobre las armas se extendiera al espacio.
“Moscú pretende restringir la capacidad de Estados Unidos al mismo tiempo que no tiene intenciones de detener su propio programa contra-espacial”, dijo.
Por su parte, el jefe del directorio espacial de Reino Unido, el vicemariscal jefe del aire Harvey Smyth, dijo estar también preocupado por la última prueba satelital rusa que, según precisó, tiene “las características de un arma“.
“Acciones como esta amenazan el uso pacífico del espacio y pueden generar restos que supongan una amenaza a los satélites y los sistemas espaciales de los que depende el mundo”, advirtió.
Air Vice-Marshal @HarvSmyth, director of the UK's Space Directorate, has responded to a recent Russian satellite test in space: pic.twitter.com/zGdGwCemmR
— Ministry of Defence 🇬🇧 (@DefenceHQ) July 23, 2020
Smyth urgió a Rusia a ser “responsable” y “evitar pruebas similares en el futuro”.
Rusia, Reino Unido y China están entre los más de 100 países que se han comprometido a acatar un tratado espacial que estipule que el espacio debe ser explorado por todos y únicamente con propósitos pacíficos.
El tratado añade que las armas no se deben poner en órbita o en el espacio.
El sistema utilizado en la prueba de la semana pasada es el mismo sobre el que alertó el Comando Espacial estadunidense hace meses, cuando Rusia se aproximó a un satélite del gobierno de Estados Unidos, según informó el general Jay Raymond, que está al frente de esa rama de las fuerzas armadas.
Raymond señaló: “Esta es una prueba más de los continuos esfuerzos de Rusia por desarrollar y probar sistemas desde el espacio y es consistente con la doctrina militar publicada por el Kremlin de recurrir a armas que pongan en riesgo las instalaciones de Estados Unidos y sus aliados”.
Análisis de Jonathan Marcus, corresponsal de la BBC para Asuntos de Defensa
El ensayo ruso de lo que los estadounidenses dicen que es un arma contra satélites es parte de un patrón en la actividad espacial reciente de Rusia.
En febrero, el ejército estadounidense dijo que dos satélites rusos maniobraron cerca de uno estadounidense, y en abril, Moscú hizo un ensayo con un interceptor de satélites desde tierra.
Solo cuatro países -Rusia, Estados Unidos, China e India- han demostrado tener capacidad contra satélites en las últimas décadas. Cabezas explosivas antisatelitales han sido llevadas en aeronaves o cohetes y también se ha iluminado satélites con rayos láser.
Moscú también se está planteando claramente usar un satélite para matar otro. El interés en un arma así está creciendo dada nuestra dependencia en los satélites para una variedad de propósitos, como recopilación de información de inteligencia, navegación y alerta temprana.
No hay ningún tratado que prohíba o limite estas armas, aunque una serie de países piden que se llegue a un acuerdo para hacerlo.
Pero en términos militares, el espacio ya se ha convertido en la nueva frontera y varios países tienen comandos específicos en sus fuerzas armadas para lidiar con los aspectos tanto defensivos como ofensivos de la protección de sus sistemas esenciales en el espacio.
La prueba de un nuevo satélite ruso se realizó el 15 de julio con el objetivo de llevar a cabo una inspección del equipamiento espacial del país, dijo entonces el ministro de Defensa ruso.
“Durante la prueba de la más reciente tecnología espacial, uno de los satélites domésticos fue examinado de cerca mediante el uso de equipamiento especializado de una pequeña nave espacial”, indicó el ministro, según la agencia de noticias Interfax.
Añadió que se había registrado “información valiosa sobre la condición técnica del objeto bajo investigación”.