Con una orden judicial temporal un segundo condado del norte de Nueva York bloquea la reubicación de migrantes
La reciente avalancha de migrantes que están llegando en autobuses a la ciudad de Nueva York ha llevado a la saturación de hoteles.
El condado de Orange, en el norte de Nueva York, es el segundo en obtener una orden judicial temporal que bloquea los planes del Ayuntamiento de la Gran Manzana para reubicar allí a parte de los migrantes que están llegando en masa a la ciudad desde la frontera sur de Estados Unidos.
Una jueza de la Corte Suprema estatal decidió este martes 16 de mayo que los migrantes alojados en dos hoteles locales podrán quedarse pero vetó las nuevas llegadas después de que el dirigente del condado de Orange, Steven Neuhaus, republicano, denunciara el pasado viernes a la ciudad de Nueva York y a los dos establecimientos.
La semana pasada, el condado de Rockland, también dirigido por un republicano, ya bloqueó por orden judicial la llegada de migrantes anticipándose al fin de la medida conocida como Título 42, que desde la pandemia había permitido la expulsión inmediata de migrantes que cruzaban sin permiso la frontera con México.
La Coalición de Inmigración de Nueva York, que defiende los derechos de este colectivo, criticó como cruel la medida tomada por el condado de Orange, reclamó coordinación entre la administración de la Gran Manzana y la del condado, e indicó que actualmente hay 186 migrantes, todos hombres adultos, en los dos hoteles.
Los condados de Orange y Rockland, entre otros, han declarado estados de emergencia en sus áreas para impedir que los hoteles y otros establecimientos acepten migrantes, han criticado la falta de comunicación del alcalde de Nueva York, Eric Adams, en esas reubicaciones, y han denunciado que les faltan recursos.
El portavoz del Ayuntamiento de la Gran Manzana, Fabien Levy, dijo a The New York Post que hasta que el Gobierno federal envíe ayuda, la ciudad necesita que otras áreas arrimen el hombro, y señaló que al condado de Orange se le pidió gestionar solo a un pequeño grupo de migrantes con los gastos pagados.
La reciente avalancha de migrantes que están llegando en autobuses a la ciudad de Nueva York ha llevado a la administración de Adams, demócrata, a tomar medidas de emergencia como relajar las normas para acoger a personas sin hogar y seleccionar 20 gimnasios de escuelas públicas como posibles albergues.
Previamente la ciudad ya habilitó unos 140 albergues, muchos de ellos hoteles, que están acogiendo a familias con niños, mientras que a los jóvenes o adultos sin hijos se les ubica en otros alojamientos.
Antes de que expirara el Título 42, el pasado jueves, los servicios públicos de la ciudad ya se encontraban en un estado crítico tras la llegada de unos 65 mil inmigrantes desde el pasado agosto.
Nueva York es la única ciudad del país que por ley tiene obligación de dar techo a cualquier persona que no lo tenga, y es el argumento que algunos dirigentes republicanos -como los gobernadores de Texas, Greg Abbot, o de Florida, Ron DeSantis- están utilizando para fomentar de una u otra forma el traslado de migrantes hacia la Gran Manzana.