Lucy Letby habría cometido los crímenes entre 2015 y 2016, por lo que será presentada el jueves en el Tribunal de Warrington.
La enfermera británica Lucy Letby, de 30 años, fue arrestada y acusada de asesinar a ocho bebés y del intento de homicidio de otros diez en un hospital de Chester (noroeste de Inglaterra), según informó este miércoles (11.11.2020) la Policía de Cheshire.
La mujer, que ya era sospechosa de los crímenes desde 2018, cuando fue detenida por primera vez, fue arrestada de nuevo este martes y acusada por la policía tras recibir la autorización de la Fiscalía de la Corona.
Letby, vecina de Hereford, localidad cercana a Chester, será presentada ante el Tribunal de Warrington este jueves, informó la Policía de Cheshire en un comunicado.
Los cargos presentados contra ella se corresponden al período entre junio de 2015 y junio de 2016, cuando se produjeron varios fallecimientos por causas inexplicables de recién nacidos en el hospital Condesa de Chester.
Los padres de todos los bebés implicados en el caso están recibiendo información puntual por parte de las autoridades, así como apoyo psicológico, señaló la policía.
Nurse rearrested on suspicion of murdering eight babies and attempted murder of another nine at Countess of Chester Hospital https://t.co/vP3sCMa23c
— BBC News (UK) (@BBCNews) November 10, 2020
El caso conmocionó al Reino Unido, sobre todo a partir de que las sospechas de las muertes de los recién nacidos comenzaran a dirigirse en 2018 sobre la enfermera.
La policía recordó hoy que Letby tiene derecho a un juicio justo y que no debería compartirse información o comentarios en la red que conlleven perjuicio de alguna forma sobre el procedimiento en marcha.
Letby trabajó como estudiante en prácticas en el centro público durante tres años, antes de terminar sus estudios en la universidad local y especializarse como enfermera infantil.
Desde entonces, la acusada trabajó en la unidad neonatal, especializada en bebés que requieren distintos niveles de cuidados.
Cada año, esta unidad atiende a unos 400 bebés, pero desde finales de julio de 2016 dejó de admitir a niños nacidos antes de las 32 semanas de gestación, momento desde el cual no se registraron más muertes.
Un informe publicado en 2017 por el Real Colegio Médico de Pediatras y Salud Infantil concluyó que no existía “ninguna causa” que explicase el aumento de muertes en la unidad, registradas a partir de 2014.
En ese año tres recién nacidos murieron, mientras que en 2015 lo hicieron ocho y seis en 2016.