Los hijos del expresidente panameño, Ricardo Martinelli, prestos a declararse culpables en EE. UU.
“Los activos decomisados incluyen una cantidad considerable de fondos mantenidos en bancos suizos, que habrían sido excepcionalmente difíciles de recuperar sin el acuerdo de los hermanos Martinelli de declararse culpables y tomar medidas afirmativas para facilitar el acceso de los Estados Unidos a estos fondos”, indicó una carta de su defensa en EE.UU., a la que este martes tuvo acceso Efe.
Los hermanos Martinelli, “en previsión de un posible acuerdo de culpabilidad, dieron su consentimiento por separado para la liberación y transferencia de casi 1,7 millones de dólares en fondos para el gobierno de EE.UU. hace más de tres meses”, indicó la misiva, suscrita por el abogado defensor James G. McGovern, del despacho Hogan Lovells US LLP.
El pasado 1 de noviembre, el fiscal Breon Peace, del Distrito Este de Nueva York, ordenó la incautación de un total de 1.697.478 dólares de las cuentas de Luis Enrique Martinelli y Ricardo Alberto Martinelli.
La carta de McGovern está dirigida a la jueza de primera instancia del Distrito Este de Nueva York, Marcia M. Henry. Tiene fecha de ayer 15 de noviembre, día en que Luis Enrique fue extraditado por Guatemala, donde junto a su hermano estuvo detenido 16 meses luchando contra la entrega a EE.UU. alegando su estatus diplomático por ser diputados al Parlamento Centroamericano.
Ricardo Alberto permanece detenido en Guatemala y se espera que pronto sea entregado a EE.UU., ya que renunció a la batalla legal para impedirlo.
En la carta dirigida a la magistrada Henry, el abogado McGovern plantea que Luis Enrique sea beneficiado con una fianza, y propone para ello, entre otros, “un bono de reconocimiento personal de 3 millones de dólares, garantizado por 1 millón en efectivo del Sr. Martinelli”.
Negociaciones con las autoridades de EE. UU.
El abogado McGovern explicó que en 2018 los hermanos Martinelli “comenzaron a reunirse voluntariamente con fiscales federales en relación con la investigación de los Estados Unidos”, pero que a mediados de 2020 “cometieron un error grave e irreflexivo” al salir de ese país e intentar llegar a Panamá “buscando reunirse con su familia y defenderse de los cargos panameños pendientes”.
En Panamá, los hermanos Martinelli están imputados por presunto blanqueo de capitales en un caso conocido como “Blue Apple”, y la Fiscalía también pidió llamarlos a juicio por el caso Odebrecht, una causa por la que su padre está imputado por lavado de dinero y tiene prohibición de salida del país.
Desde la prisión en Guatemala, los hermanos Martinelli “reanudaron las negociaciones para un acuerdo de culpabilidad que resolvería la investigación pendiente de Estados Unidos”.
Los hermanos Martinelli “acordaron viajar a los Estados Unidos desde Guatemala (…) para aceptar la responsabilidad por sus delitos (…) y proceder a la sentencia. A pesar de este compromiso (…) el gobierno se ha negado a discutir los términos de un paquete de fianza apropiado”, dijo McGovern.
La acusación
En una nota difundida por la Embajada de EE.UU. en Panamá se explicó que los hermanos Martinelli “se presume en la acusación y otras presentaciones judiciales que conspiraron con otros para lavar aproximadamente 28 millones de dólares en pagos de sobornos hechos por y bajo la dirección de Odebrecht a un funcionario de alto rango en ese entonces del gobierno de Panamá, que era un pariente cercano de los acusados”.
Los sindicados fueron inicialmente acusados el 27 de junio de 2020 por medio de una denuncia penal”, fueron detenidos el 6 de julio de 2020 en Guatemala a pedido de Estados Unidos cuando intentaban salir de Guatemala en un avión privado, y el 4 de febrero de 2021 fueron acusados formalmente con cinco cargos.
La denuncia acusó a ambos sindicados “de un cargo de conspiración para cometer lavado de dinero y dos cargos de encubrimiento de lavado de dinero; Luis Martinelli Linares también fue acusado de dos cargos de participación en transacciones de propiedad obtenida ilícitamente”, precisó la información estadounidense.
“La extradición de Luis Martinelli Linares al Distrito Este de Nueva York es un primer paso significativo para que rinda cuentas por supuestamente haber lavado millones de dólares en pagos de sobornos a través de cuentas bancarias en Nueva York y otros lugares. Combatir el soborno y el lavado de dinero extraditando y enjuiciando a actores extranjeros corruptos como Martinelli es una prioridad del Departamento de Justicia”, dijo el fiscal para el Distrito Este de Nueva York, Breon Peace.