Masacre en Texas: abogado de maestra sobreviente en escuela hizo revelaciones sobre cómo fue el fatal momento
Educadora quedó tan asustada que no podría “jamás volver a poner un pie en un campus escolar”.
Una maestra de Robb Elementary, donde ocurrió la masacre de 19 estudiantes y dos maestros en el tiroteo escolar masivo más mortífero en casi 10 años, fue testigo de primera mano del horror.
Ella caminaba afuera del establecimiento el 24 de mayo último para ayudar a un compañero a traer comida para una fiesta cuando vio un accidente automovilístico, según su abogado, Don Flanary, que habló con la cadena CNN.
Marin entró a la escuela para reportar el accidente y dejó abierta la puerta con una piedra, contó el abogado.
Cuando la maestra regresó a la puerta, mientras hablaba con los operadores del 911, vio a su compañero de trabajo escapar, y escuchó a varias personas que del otro lado de la calle gritaban: “¡Tiene un arma!”.
Flanary agregó que Marin vio que el pistolero se acercaba, por lo que cerró la puerta de una patada y corrió a un salón de clases cercano, acurrucándose debajo de un mostrador.
La maestra escuchó disparos primero al aire libre y después adentro del centro escolar, agregó el abogado, pero su llamada a emergencias fue desconectada.
Entonces, agarró sillas y luego cajas para ayudar a ocultar su ubicación y se quedó quieta.
Marin recibió un mensaje de texto de su hija para preguntarle si estaba a salvo, y le respondió: “Hay un tirador, está disparando. Está aquí”, según su abogado.
Minutos después le escribió a su hija que podía escuchar a la policía, hasta que silenció su teléfono por miedo a que el pistolero, identificado como Salvador Ramos, la encontrara.
El abogado precisó que la docente escuchó cada disparo en la escuela.
“Ella pensó que él iba a entrar y matarla, e hizo las paces con eso. Ella pensó que no saldría viva”, expresó Flanary, de acuerdo con la publicación de CNN.
El atacante atacó a otro salón y no encontró a Marin, cuyo nieto estudia en Robb Elementary, también estaba en otro lugar y sobrevivió.
Las autoridades dijeron a los días que Ramos había ingresado a la escuela por una puerta que quedó abierta, lo que exacerbó a la maestra.
“Se sentía sola, como si ni quisiera pudiera llorar. Ella se cuestionó a sí misma, como ‘¿no hice eso?’”, añadió Flanary.
Después se aclaró que el tirador había entrado por otra puerta, pero toda la experiencia afectó la salud mental de su defendida, dijo Flanary, y que ella “no puede dejar de temblar”.
“Vimos el video, no hiciste nada malo”, le dijeron los investigadores a Marin, según su defensor.
Aun así, cuando se le preguntó si la educadora regresaría al salón de clases, Flanary respondió: “No creo que jamás pueda volver a poner un pie en un campus escolar”, reveló CNN.