“Fatal”: usuarios de redes sociales cuentan situaciones negativas que han vivido en el Aeropuerto La Aurora
Usuarios en redes sociales narraron cómo han tenido malas experiencias en el Aeropuerto La Aurora.
El sábado 25 de junio ocurrió un apagón en las instalaciones del Aeropuerto Internacional la Aurora que duró aproximadamente dos horas.
A pesar de que el sistema eléctrico pudo restablecerse ese mismo día, no evitó que más de 1 mil 500 pasajeros se vieran afectados, así como diez vuelos de llegada, cinco de espera y sus respectivas conexiones.
Este incidente dejó en evidencia fallas y carencias que tiene el aeropuerto, mismas que fueron señaladas por organizaciones empresariales dedicadas al turismo.
“Hay mucha preocupación por el estado deteriorado en general que se encuentra el Aeropuerto Internacional La Aurora debido a que es la primera y última impresión que se lleva un turista, hombre de negocios e inversionista de Guatemala”, indicó en su momento Mark Rogers, presidente de la Gremial de Tour Operadores y Transporte Turístico de Guatemala.
Falta de mantenimiento en las instalaciones, carencia de inversión, fallas y desperfectos en sistemas de seguridad y una mala organización de las autoridades fueron algunos de los problemas señalados ante el reciente incidente.
Prensa Libre lanzó en sus redes sociales una pregunta donde se solicitaba a los usuarios que narraran sus experiencias en el aeropuerto.
Varias fueron las opiniones de la población guatemalteca en las que hacían mención a las carencias y fallas que han podido ver de primera mano al momento de ingresar al aeropuerto.
Instalaciones descuidadas
Una de las principales quejas de los usuarios fue el poco mantenimiento que las autoridades dan a las instalaciones del aeropuerto, recalcando la poca higiene de los servicios sanitarios y el deterioro de áreas de seguridad.
“Las sillas están rotas o en mal estado. No sé si ya lo repararon pero la puerta electrónica de las llegadas no funcionaba correctamente, los baños con grifería sin funcionar o tapados. Huele a húmedo en general y no hay conexiones eléctricas“, comentó Bernarda Jiménez.
La usuaria Carmen Gutiérrez indicó: “Fatal. Paso a revisión y las cintas están rotas o con nudos, además de que las paredes están sucias. Los baños están sin reparar, sin agua, los lavamanos sin llaves, los techos completamente rotos. En fin… ver para creer”.
“Las alfombras siempre están sucias y deterioradas al igual que los vidrios. Y un aspecto muy importante es que al ingresar al aeropuerto se tiene un panorama muy feo y lúgubre ya que mucha de la iluminación no funciona“, narró el ciudadano Juan Diego Navarro.
Otra de las quejas que reportaron los usuarios fue con respecto al estacionamiento, señalando que es excesivamente caro y peligroso a horas de la noche. “Siendo un aeropuerto internacional, está por debajo de los aeropuertos de nuestros países vecinos“, opinó Pao Castañaza.
Maria Eugenia Grajeda Minera comentó el estado del parqueo luego de dejar a familiares suyos en el aeropuerto: “El parqueo no tiene luz en los elevadores, los mismos todos golpeados y las puertas completamente rotas, me dio miedo y usé las gradas, las cuales están es estado calamitoso, un total desastre”.
Edgar Aguilar comentó la mala organización al momento de pasar a la ventanilla de migración: “Es un desastre, todo está poco iluminado, es un lugar completamente pequeño y las colas de migración hace que se vuelva un desorden todo. No hay orden por parte de las autoridades y ni siquiera hay aire acondicionado”.
Malas actitudes
Otro tema que criticaron los usuarios fue el mal trato que reciben por parte de las autoridades del aeropuerto.
“El 11 de junio un familiar no pudo salir porque a la persona de migración no se le dio la gana, aún cuando mi familiar contaba con los documentos legales extendidos por la embajada estadounidense. Hay personas con abuso de autoridad, groseras, arrogantes”, indicó Juan Carlos Barrientos.
Maritza Elizabeth Pérez narró una desagradable experiencia con una de las trabajadoras del aeropuerto: “Este lugar es pésimo en cuanto al recurso humano, tuve una experiencia terrible con una trabajadora de migración, simple y sencillamente se encaprichó con no querer dejar salir a mi hija del lugar“.
“En una ocasión la encargada de inmigración estaba de mal humor, nos recibió con gritos y regaños. ¿Así Guatemala quiere recibir más turistas con esa actitud?“, comentó Delmar Ramírez Pérez.