Púas y grilletes: estos desafíos enfrentan migrantes por blindaje de la frontera de EE. UU. por vencimiento del Título 42
Miles de migrantes que intentan cruzar la frontera de México hacia Estados Unidos se topan con una serie de obstáculos ante el vencimiento del Título 42.
A horas de que termine la vigencia del Título 42 que ordenaba expulsar de Estados Unidos a los indocumentados por temas de salud pública, miles de migrantes viven incertidumbre en la frontera entre México y EE. UU., donde además de la patrulla fronteriza, se han topado con una serie de medidas que blindan a aquel país de la migración irregular.
A partir de este jueves 11 de mayo, la frontera entre ambos países cierra un capítulo y entra en una nueva era: El Título 42, una norma sanitaria impuesta por el Gobierno de Donald Trump (2017-2021) que permitía las expulsiones en caliente con la excusa de la pandemia del covid-19, llega a su fin, destacó EFE.
Las personas migrantes intentan llegar a los EE. UU. a través del Río Bravo, visto desde Matamoros, estado de Tamaulipas, México.
Al terminar la referida disposición regirá el Título 8, que contrario del Título 42, trae aparejadas sanciones: si el migrante intenta entrar de nuevo sin una documentación válida se le castiga con una prohibición de reingreso de al menos cinco años y posibles procesos penales.
Pero qué están viviendo los migrantes ante el blindaje que preparó Estados Unidos para desalentar la migración irregular.
Grillete electrónico
Las familias que sean detenidas cruzando de manera irregular la frontera sur de Estados Unidos serán monitoreadas con un grillete electrónico y estarán sujetas a un toque de queda mientras las autoridades estudian sus casos, precisó EFE.
El gobierno tomará esta medida con el fin de asegurarse de que las familias se presenten a las entrevistas con un motivo creíble para determinar si tienen un caso para presentar una petición de asilo, indicó este miércoles 10 de mayo el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de EE. UU. (ICE, en inglés) en un comunicado.
Las familias que reciban una respuesta negativa después de haberse presentado a la entrevista serán deportadas en un plazo de 30 días, agregó el comunicado.
Este nuevo programa del gobierno estadounidense solo aplica a las familias que provengan de países a los que existan vuelos de deportación y que residan en Newark, Washington, Baltimore y Chicago, según informó el diario L.A. Times.
A partir de ahora, la principal vía legal para solicitar asilo en EE. UU. será a través de la aplicación móvil CBP One, que permite a los migrantes concertar citas con las autoridades para exponer sus casos.
Envían 24 mil agentes a la frontera
“Hemos contratado y tendremos listos para desplegar a unos 1 mil funcionarios de asilo para llevar a cabo las entrevistas de miedo creíble en la frontera a partir del jueves”, explicó un funcionario estadounidense, informó EFE.
Como parte del refuerzo de personal, el Gobierno estadounidense también desplegó unos 24 mil “oficiales del orden” en la frontera, además de unos 400 “voluntarios”.
Control con drones
El blindaje de la frontera de Estados Unidos no queda solo ahí, ya que hay una batalla en favor de un refuerzo de la frontera con México para compensar el levantamiento de la normativa que ha permitido expulsiones en caliente.
Esta situación tiene uno de sus frentes más activos en el Congreso estadounidense, donde distintas iniciativas buscan imponer nuevos controles migratorios.
La medida estrella de la iniciativa republicana aboga por retomar la construcción de un muro entre ambos países siete días después de su promulgación. Fue una de las principales promesas de Donald Trump en su campaña electoral de 2016 y de su mandato, pero no llegó a finalizarse, y Joe Biden paralizó las obras a su llegada a la Casa Blanca en enero de 2021.
También pretende vigilar la frontera con drones las 24 horas o permitir al Departamento de Seguridad Nacional trasladar a terceros países seguros a los solicitantes de asilo “sin la necesidad actual de acuerdos bilaterales con esos países”.
Alambrado de púas
En el río Bravo se han incrementado los cruces de personas en colchones inflables convertidos en improvisadas lanchas, constataron periodistas de la AFP.
Y una vez en territorio estadounidense cientos de personas acampan con la esperanza de sortear la valla metálica por miedo de que a partir del viernes 12 de mayo sea más difícil.
Jimmy Muñoz, un ecuatoriano de 29 años, logró entrar pero tiene frente a él un alambrado de púas y la valla de unos 4 metros de alto.
“Tengo la esperanza de poder quedarme en este país”, declaró a un equipo de la AFP en Brownsville, Texas, antes de acceder al punto de control donde se decidirá su suerte.
En imágenes compartidas por AFP se observa cómo soldados estadounidenses cuidan su territorio y junto a ellos un muro de alambra de púas complica la movilidad de los migrantes. Estas escenas son visibles desde Matamoros, estado de Tamaulipas, México.
Helicópteros en la frontera
El recién pasado 8 de mayo, el gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, ordenó el envío de cientos de soldados de la Guardia Nacional a la frontera entre Estados Unidos y México, en un intento de frenar el previsible aumento de la inmigración.
“La Guardia Nacional de Texas está cargando helicópteros Blackhawk y C-130 y desplegando soldados especialmente entrenados para la Fuerza Táctica Fronteriza de Texas, que serán desplegados en puntos calientes a lo largo de toda la frontera para ayudar a interceptar y repeler a grandes grupos de migrantes que intentan entrar ilegalmente a Texas”, dijo Abbott.