SBS afronta deuda millonaria por compra de alimentos
La Secretaría de Bienestar Social de la Presidencia (SBS) debe Q11.3 millones en alimentos que proporciona a menores y la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) presentó recomendaciones para mejorar la atención, entre ellas por la falta de medicamentos, personal médico y hacinamiento en hogares.
Según una evaluación de la PDH, en todos los centros a cargo de la Secretaría se debe considerar mejorar el acceso al agua entubada, servicios médicos y alimentación.
Diego Adolfo Cárdenas, defensor de la Niñez y Adolescencia de la PDH, dijo que hay “dificultades con la alimentación, las residencias de abrigo y protección tampoco son ajenas a un adecuado servicio de alimentación, normalmente llega en malas condiciones, frío o ya no en condiciones de poder ser ingeridos por las adolescentes”.
Cárdenas comentó que al ingerir la comida en mal estado los menores pudieran padecer de problemas de salud.
La PDH indicó que, hasta diciembre de 2023, la Secretaría de Bienestar Social no contaba con recursos para la compra de medicamentos y tenía una deuda de Q11 millones 309 mil 410.50 a la empresa Banquetes de Guatemala, S.A., quien le dio un ultimátum para pagar la deuda, de lo contrario dejaría de suministrar los alimentos.
Dicha empresa ha recibido Q408.2 millones por parte del Estado del 2004 a la fecha, por la adquisición de sus productos.
En el 2023, último año de gestión de Alejandro Giammattei como presidente, las adjudicaciones a la compañía aumentaron a 263, cobrándole al Estado Q181.4 millones.
Hacinamiento y medicamentos
Abner David Paredes, defensor de la Juventud de la PDH, dijo que hay que buscar un mecanismo legal para contratar al personal médico.
“Nos sigue preocupando que no se cuente con el personal médico necesario, sabemos que hay algunas limitaciones a la hora de contratar a los profesionales, por una resolución de Contraloría en su momento, en donde no pueden prestar servicio en otras instituciones del Estado y eso limita esa posibilidad de contrato; sin embargo, es un tema que será necesario buscar como se logra porque no pude ser un argumento en materia de derechos humanos de niñez y adolescencia”, comentó Paredes.
Por su parte, Cárdenas dijo que existe un hacinamiento en los 16 centros de atención integral y que, incluso, algunos menores duermen en el suelo.
“Es una situación que actualmente se da en las residencias a cargo de la Secretaría, hay sobrepoblación y hacinamiento, hay residencias con capacidad para 16 adolescentes y actualmente hay 70 viviendo en el lugar, lo que atrae una serie de consecuencias negativas. Hay adolescentes que duermen en el suelo en una colchoneta, cuentan con un solo servicio sanitario para las 70 adolescentes, agua, servicios de higiene personal son cuestiones que se generan producto de la sobrepoblación y hacinamiento”, señaló Cárdenas.
El defensor afirmó que en el 2024 se hizo una supervisión a las residencias de abrigo y protección “y se constató que en lo que va del año han tenido inconvenientes en adquirir insumos de higiene personal, insumos de limpieza de las residencias e insumos básicos”.
Además, mencionó que no hay una clasificación de perfiles de los menores en los centros.
Marvin Rabanales, encargado de la SBS, mencionó que hacen evaluaciones y auditorías, debido a que hay “una deuda de arrastre significativa que tiene que pagarse”.
“Se están realizando las evaluaciones, se ha solicitado a la Contraloría General de Cuentas las auditorias que correspondan. Ya la delegación que está instalada dentro de la secretaria está haciendo la auditoria al ejercicio 2023, seguramente tendremos un informe al finalizar el año. Independientemente, que no podemos esperar, ya se está trabajando con la supervisión de la prestación del servicio, que este cumpla con los estándares, especialmente con el contrato, con las bases de licitación. Se tienen deudas no solamente con este tema, hay también compromisos fruto de la negociación colectiva, hay compromisos del alquiler de bienes inmuebles”, dijo Rabanales.
Agregó que “Estamos conscientes de que hay un reto y un gran desafío, porque necesitamos recurso humano, necesitamos mejorar infraestructura, mejorar la calidad de los servicios en general y la alimentación que tiene que ser adecuada a las necesidades individuales de cada uno de los niños, niñas y adolescentes.