Ochenta y dos personas, la mayoría niños, han sido ingresadas al Hospital Nacional de San Marcos, luego de haberse intoxicado con alimentos que comieron en la escuela de San Rafael, San Antonio Sacatepéquez, San Marcos.
Cecilio Chacaj, vocero de los Bomberos Municipales Departamentales, informó que durante la tarde han trasladado a 70 niños, de entre 8 y 12 años y a 12 adultos por vómitos, diarrea y signos de deshidratación.
Chacaj expresó que los padres de familia informaron que los estudiantes habían comido frijoles y arroz en la escuela, pero fue hasta horas de la tarde que varios empezaron con malestar y por eso fueron llevados al hospital. Los adultos fueron afectados porque llevaron a sus casas la comida que sobró en la escuela.
Añadió que todos los menores ya están bajo tratamiento en el hospital y que muchos tenían señales de deshidratación.
Según Chacaj, la aldea de encuentra a media hora de camino de la cabecera, por lo que el traslado de los pacientes ha sido complicado.
El portavoz recomienda a los encargados de la preparación de los alimentos en las escuelas que tomen las medidas higiénicas necesarias para evitar casos como este, pues cuando las complicaciones son mayores pueden causar la muerte, debido a la deshidratación.
“Deben lavarse las manos, desinfectar el área de trabajo y asegurarse que los alimentos no hayan estado en contacto con contaminantes”, dijo Chacaj.
El pasado 17 de abril, 31 campesinos se intoxicaron luego que comieron caldo de pollo para celebrar la cosecha en la comunidad Nuevo Amanecer, Lanquín, que colinda con Senahú y San Pedro Carchá, Alta Verapaz.
Los afectados detallaron que poco tiempo después de la comida se sintieron mal, con vómitos y diarrea, y cinco viajaron por sus medios al Hospital Regional de Cobán, para recibir asistencia. Con el paso del tiempo, otras 26 personas fueron llevados por cuerpos de socorro.
En Zacapa, el 15 de abril del 2016, una mujer y su hijo murieron intoxicados luego de comer caldo de gallina, mientras que otros tres familiares quedaron internados en el hospital de la localidad.
Los fallecidos fueron identificados como Alba Alicia García Almazán, de 26 años, y su hijo Elvin Leonel López García, quienes murieron en la ambulancia de los Bomberos Voluntarios que los trasladaba.