La exmandataria, que tuvo que renunciar a su cargo en marzo del año pasado después de meses de protestas callejeras, fue encontrada culpable de corrupción y abuso de poder.
La expresidenta de Corea del Sur Park Geun-hye fue condenada este viernes a 24 años de cárcel por corrupción y abuso de poder.
A Park, de 66 años, también le impusieron multas por el orden de 18.000 millones de wones (unos US$17 millones), al final de un proceso judicial que duró más de 10 meses.
La exmandataria, que siempre rechazó los cargos, boicoteó las etapas finales del proceso y no estaba en el juzgado para escuchar el veredicto, que sin embargo fue transmitido en vivo para todo el país.
“Sentencio a la acusada a 24 años de cárcel y 18.000 millones de wones en multas”, aseguró durante la lectura el juez Kim Se-Yoon.
La estrecha amistad entre la exmandataria y Choi Soon-sil –quien fue condenada por corrupción en febrero- está en el centro del escándalo que mandará a Park a la cárcel y convulsionó durante meses al país.
A las dos mujeres se las acusa de haberse coludido para presionar a importantes conglomerados industriales, como Samsung, para recibir sobornos a cambio de favores políticos.
“La cantidad de sobornos que la acusada recibió o pidió en colaboración con Choi suma más de 23.000 millones de wones (US$21,7 millones)”, aseguró durante la lectura el juez Kim Se-Yoon.
A Choi también se la acusaba de ejercer una influencia indebida sobre los asuntos del país gracias a su estrecha relación con Park, quien llegó al poder en 2013.
Y el destape del escándalo de corrupción generó meses de protestas en las calles, forzando la renuncia de Park en marzo del año pasado.
La exmandataria fue arrestada poco después y ha estado bajo custodia policial desde entonces.