La catedral de Notre Dame, que este lunes sufrió graves daños a causa de un devastador incendio, es sin duda uno de los edificios más emblemáticos de París, la capital francesa.
Pero además de ser una atracción turística que es visitada cada año por más de 13 millones de personas y que alberga reliquias de incalculable valor, ha sido a lo largo de sus más de ocho siglos de historia objeto de numerosas leyendas y escenario de importantes obras literarias.
Quizás la obra más conocida es “Nuestra Señora de París”, del escritor francés Víctor Hugo, publicada en 1831 y que cuenta la historia de Quasimodo, el jorobado que cuida de las campanas de la iglesia.
Según la experta en literatura francesa y profesora emérita de la Universidad de Princeton, Suzanne Nash, la obra de Víctor Hugo “tuvo in impacto tan dramático en la actitud del público francés hacia el patrimonio que ese mismo año el gobierno estableció la Comisión de Monumentos Históricos”.
La obra está ambientada en el siglo XV en París y describe la vida medieval en la capital francesa bajo el reinado de Luis XI.
El protagonista de esta historia es Quasimodo, un hombre sordo y deformado por una joroba en su espalda cuyo trabajo es ser el campanero de la catedral de Notre Dame.
Termina enamorándose de Esmeralda, quien se apiada de él después de que fuera humillado y golpeado por una multitud de personas.
Cuando el archidiácono de la catedral, Claude Frollo, quien también está obsesionado con Esmeralda, descubre que ella está enamorada del capitán Febo, apuñala al capitán y la mujer es acusada de ser la autora del ataque.
Quasimodo intenta proteger a Esmeralda en la catedral, pero finalmente ella termina en la horca.
Dolorido y desesperado, Quasimodo arroja a Frollo desde una de las torre de la catedral.
Al final de la historia, en la tumba de Esmeralda se encuentran dos esqueletos: el del jorobado abrazando a una mujer.
La novela de Víctor Hugo inspiró también varias películas, obras de teatro y musicales, entre otras muestras de arte.
En 1939, se estrenó la película “El jorobado de Notre Dame”, que es ampliamente considerada como la mejor adaptación de la novela, con el actor inglés Charles Laughton como protagonista.
Disney también llevó la historia al cine en 1996 con una adaptación animada cuyo tema principal en la versión para Latinoamérica era “Sueña”, interpretada por el cantante Luis Miguel.
Más allá de la ficción, en 2010, historiadores descubrieron referencias a un tallador “jorobado” real que podría haber inspirado a Victor Hugo.
Investigadores encontraron en las memorias de Henry Sibson, un escultor británico del siglo XIX que trabajaba en la catedral, una mención a un compañero de trabajo que era jorobado.
“Hice una solicitud en los estudios del gobierno, donde estaban realizando grandes figuras y aquí me encontré con M. Trajan, el hombre más digno, paternal y amable que jamás haya existido”, dicen las memorias de Sibson, que forman parte del archivo de la Galería Tate de Londres.
El texto continúa: “Él era el tallador del escultor del gobierno, cuyo nombre olvidé porque no me relacioné con él. Todo lo que sé es que él era jorobado y que no le gustaba mezclarse con los talladores”.
Notre Dame fue construida entre 1163 y 1345 en la Île de la Cité de París y es una de las catedrales góticas más antiguas y la tercera de ese estilo más grande del mundo, después de la de Colonia (Alemania) y Milán (Italia).