Nike tenía todo listo para conmemorar este 4 de julio, Día de la Independencia de Estados Unidos, con una edición especial de zapatillas, las Air Max 1 Quick Strike,
Pero el gigante de la ropa deportiva decidió este martes que no había sido una buena idea: las zapatillas llevaban una versión de la bandera que muchos consideran un símbolo racista.
Uno de los que más ruido hizo fue el jugador de fútbol americano Colin Kaepernick, el que primero que empezó a arrodillarse cuando sonaba el himno antes de los partidos de la NFL en protesta por los abusos policiales contra los negros.
Convertido en influyente activista contra el racismo, Kaepernick criticó que las zapatillas llevaran la bandera de Betsy Ross, que considera conectada a la era de la esclavitud.
Nike dijo que retiró el modelo “debido a las preocupaciones de que podría ofender involuntariamente y restar valor el día patriótico”.
Pero no todos celebraron la decisión de la marca.
El gobernador de Arizona, Doug Ducey, calificó la decisión como “terrible” y retiró el martes un incentivo de US$1 millón para la instalación de una fabrica en el estado.
El martes, las zapatillas se podían encontrar por más de US$2.000 en StockX, el mercado en internet para venta de calzado.
La bandera de Betsy Ross fue la primera de Estados Unidos.
Cuenta con 13 líneas rojas y blancas alternadas, y otras tantas estrellas para representar las colonias originales del país.
Aunque la opinión está dividida sobre sus orígenes, la bandera fue adoptada más tarde por el partido nazi estadounidense y es un emblema que defienden los supremacistas blancos.
El gobernador de Arizona publicó una serie de tuits el martes repudiando la decisión de Nike de sacar el modelo de mercado.
“Las palabras no pueden expresar mi decepción por esta terrible decisión. Estoy avergonzado por Nike“, escribió Ducey.
“En lugar de celebrar la historia de Estados Unidos en la semana de la independencia de nuestra nación, Nike aparentemente decidió que Betsy Ross es indigna y se ha rendido ante el ataque actual de la corrección política y el revisionismo histórico”, continuó.
https://twitter.com/dougducey/status/1145981307895238656
Más tarde, la oficina del gobernador confirmó que se habían retirado el millón del Fondo de Competiciones de la Autoridad de Comercio de Arizona.
El fondo está diseñado para atraer, expandir o retener negocios en el estado. Se esperaba que la fábrica de Nike generara alrededor de 500 empleos.
Nike dijo en un comunicado que seguía comprometida a realizar “una inversión significativa en un centro de fabricación adicional que creará 500 nuevos empleos”.
No mencionó la planta de Arizona por su nombre.
El senador de Texas, Ted Cruz, también rechazó la medida de Nike y la calificó de antipatriótica.
“Solo quiere vender zapatillas a las personas que odian la bandera estadounidense”, escribió en Twitter
Numerosos usuarios de Twitter respaldaron a la marca cuando retiró el producto del mercado puntualizando que la bandera había sido utilizada por los nacionalistas blancos.
Matt Powell, asesor de la consultora estadounidense de consumo NPD, dijo que Nike probablemente encuentre apoyo entre sus principales consumidores.
“Creo que es importante entender quién es el núcleo demográfico de Nike. Están muy centrados en los adolescentes y, al mirar los comentarios en Twitter, no veo que muchos adolescentes tengan una actitud negativa aquí“.
Nike no es la única compañía que recientemente se enfrentó a una fuerte crítica por productos etiquetados como insensibles racialmente.
En diciembre, Prada retiró del mercado productos acusados de “blackface” (cara negra), una expresión que se usa para cuando alguien se pinta la cara de color negro para parecerse a alguien de otra raza, y que puede ser una acción ofensiva.
Y el lunes, la estrella de reality TV y empresaria Kim Kardashian dijo que cambiaría el nombre de su línea Kimono luego de que la gente en Japón dijera que su uso del término fue irrespetuoso.