Con su liderazgo en entredicho en medio de la mayor crisis de la historia de su compañía, el creador y director ejecutivo de la red social más popular del mundo asegura que no va a dejar de dirigir Facebook.
El escándalo por las fallas de privacidad en Facebook parece no tener final.
Hace unos días, fue el caso de Cambridge Analytica, la firma británica que se hizo con datos de los usuarios de la red social para utilizarlos luego en campañas de marketing político y que este miércoles se supo que afectó en realidad a 87 millones de perfiles y no 50 millones.
Ahora, también se conoce que el robo de datos personales no quedó ahí.
El creador y director ejecutivo de la red social, Mark Zuckerberg, reconoció este miércoles que “actores maliciosos” utilizaron un mecanismo predeterminado de Facebook para recopilar datos personales de los usuarios.
Se trata de una función que permite encontrar otros perfiles escribiendo direcciones de correo electrónico o números de teléfono en el cuadro de búsqueda de Facebook.
Como resultado, según Zuckerberg, la información del perfil público de muchas personas había sido recopilada para hacerla corresponder con los detalles de contacto que se habían obtenido por terceras partes.
Facebook había establecido esa función por defecto, por tanto, si los usuarios no la inhabilitaron en sus configuraciones de privacidad, sus datos de contacto pudieron haber sido robados.
“Es razonable esperar que si tuviste esa configuración activada, en los últimos años alguien probablemente haya accedido a tu información pública de esta manera”, admitió Zuckerberg.
Hasta el momento, se desconoce a quiénes o a qué se refirió el fundador de Facebook con el término “actores maliciosos”.
Zuckerberg informó, no obstante, que la red social ya había inhabilitado recientemente esta función.
“Hoy, dado lo que sabemos, creo que entendemos que debemos tener una visión más amplia de nuestra responsabilidad”, reconoció.
La conferencia de prensa en la que se conoció este nuevo error de seguridad fue la segunda vez en la que el fundador de Facebook habla tras el escándalo de Cambridge Analytica.
Pero no quedó ahí.
Otro ejecutivo de Facebook, Mike Schroepfer, reconoció este miércoles que el número de usuarios afectados por el escándalo de la firma británica Cambridge Analytica es de 87 millones, lo que representaría, en términos prácticos, casi el doble de la población de un país como Argentina.
La firma británica, a través de un aparentemente inocente test de personalidad en la red social, adquirió datos de los usuarios para utilizarlo luego en campañas de marketing político en campañas electorales, principalmente en las de Estados Unidos en 2006, según revelaron varios en marzo.
El nuevo número, dado a conocer por Schroepfer a través de un blog de la compañía, supone un aumento de unos 37 millones de afectados respecto a la cifra conocida originalmente.
El suceso generó fuertes críticas en contra de la red social, especialmente tras difundirse que sus directivos conocían desde hacía varios años lo ocurrido y que, pese a ello, se habían limitado a confiar en que la empresa de consultoría cumpliría con su palabra de borrar la información.
Sin embargo, según la televisora británica Channel 4, que reveló el escándalo, mucha de la información todavía sigue circulando.
Tras el anuncio de reformas en las configuraciones de privacidad de Facebook, algunas aplicaciones que usan la red social para iniciar sesión vieron interrumpidos este miércoles ese mecanismo, como la popular de citas Tinder.