Pobladores de Chiquimula están preocupados por la falta de espacio en el Cementerio General, por lo que hacen un llamado a la comuna para que analice la situación.
La cantidad de bóvedas en el camposanto ha incrementado de forma drástica durante las últimas dos décadas, informan vecinos, muchos de los cuales han tenido que pagar terrenos en cementerios privados o bien inhuman a más de un familiar en la misma tumba.
En el Cementerio General las familias tienen un espacio para edificar bóvedas de hasta cinco nichos para garantizar un lugar para los restos de sus seres queridos. Sin embargo, hay lugares donde las tumbas peligran por hundimientos o terrenos en pendientes.
De acuerdo con Humberto Penados, concejal tercero “la semana pasada una comisión municipal fue a la Aldea El Ingeniero” y ubicó el espacio físico para “habilitar un cementerio nuevo”.
Queda pendiente según el funcionario “que la Oficina de Ingenieros y Arquitectos vaya a hacer una evaluación del terreno y puedan elaborar planes y presupuestos para poder empezar el trabajo de habilitación”.
Es por ello que vecinos sugieren a las autoridades ediles la construcción de otro cementerio que ayude a contrarrestar la cantidad reducida de espacio en el actual camposanto. Además, han solicitado vigilancia, pues ha sido zona de asaltos y contaminación.
Respecto a la inseguridad en el cementerio, la comuna aseguró que coordinarán con la policía para dar vigilancia adecuada; además, animaron a pobladores a denunciar hechos negativos en la oficina de asuntos municipales.