El multicolor de los trajes ceremoniales, el esfuerzo por mantenerse sobre el caballo y dominar al animal, es una tradición huehueteca conocida como el "Juego de gallos".
Cada 1 de noviembre, los jinetes entre rituales mayas llevan a cabo esta tradición cada año.
Los participantes utilizan su traje ceremonial y se preparan para cabalgar por varias horas, esta carrera es un ritual originaria de la región de Huehuetenango, el cual es producto de la Conquista.
Una de las características de la tradición es el consumo de aguardiente. Al ritmo de marimbas en las calles, ancianos, hombres, mujeres, jóvenes consumen alcohol hasta embriagarse por completo.
Los jinetes se preparan mental y espiritualmente para honrar a sus difuntos, un día antes.
Parte del ritual ceremonial es dar sangre de aves de corral como ofrenda e ingerir licor mientras se realiza la misma, esto con el fin de obtener el aprobación de los antepasados para honrarlos.
Según la leyenda de los pobladores en dicha carrera debe de morir uno de los jinetes para que sea un buen año para todos los habitantes del departamento.
El capitán que inicia la carrera debe de contar con un buen ingreso económico, ya que es quien dona la comida y las bebidas para esta actividad.