Con este resultado, River alcanzó a su vencido en el quinto puesto de la Superliga, que comparten con 10 puntos, a cuatro unidades del líder Atlético Tucumán.
River Plate derrotó a Boca Juniors por 2-0 (parcial 1-0) en el superclásico del fútbol argentino, correspondiente a la sexta fecha de la Superliga, jugado este domingo en el estadio La Bombonera en Buenos Aires.
Gonzalo Martínez (14) e Ignacio Scocco (68) anotaron los goles para el triunfo de los “millonarios”, que volvieron a desairar a los “xeneizes” con el mismo resultado con el que River había ganado la Supercopa Argentina en marzo pasado.
En un partido intenso, River fue mucho más punzante en sus ataques y aprovechó al máximo cada oportunidad, ante un Boca que jugó mal en todas sus líneas.
Con este resultado, River alcanzó a su vencido en el quinto puesto de la Superliga, que comparten con 10 puntos, a cuatro unidades del líder Atlético Tucumán.
Boca insinuó quedarse con el protagonismo en los primeros minutos, y tuvo su primera aproximación en un buen enganche de Benedetto, que buscó desde lejos y encontró una buena respuesta de Franco Armani.
Sin embargo, River pronto empezó a ganarle al local la pulseada en el mediocampo, con un jugo más dinámico y ritmo sostenido, para empezar a buscar por los costados, sobre todo por el carril derecho, donde desequilibraban Pratto y Montiel.
Por ese sector llegó la apertura del encuentro, en una pelota con múltiples errores de Boca, ya que Pavón perdió la pelota, Mas estuvo impreciso en el despeje y Jara no llegó a tiempo para cerrar ante “Pity” Martínez, que entró por la izquierda y venció a Rossi con un precioso zurdazo bombeado, que entró por el segundo palo.
Desconcertado y desordenado en el medio, Boca sufrió durante un buen rato, en un contexto en el que Wilmar Barrios vio la tarjeta amarilla por una fuerte falta sobre Martínez, que poco después dejó la cancha por una dolencia muscular, reemplazado por el colombiano Juan Fernando Quintero.
Volvió a intentar Benedetto, que encontró firme a Armani bajo los tres palos, pero River asomaba agazapado, listo para salir de contraataque y preparado para capitalizar cualquier error de los auriazules, demasiado imprecisos en una búsqueda poco productiva.
Sobre el final de la primera parte, el recién ingresado Cardona se salvó de la expulsión y sólo vio la cartulina amarilla por un codazo en la cara de Enzo Pérez.
No varió mucho el complemento, con un Boca lanzado al ataque, pero que no terminaba de encontrar huecos en la defensa férrea de su rival, más allá de algún error del árbitro Mauro Vigliano, que soslayó un penal para Boca por una evidente mano de Ponzio en el área visitante.
Las emociones volverían a aparecer con el segundo gol, anotado por Scocco, ingresado pocos minutos antes, con un tremendo derechazo al ángulo, inatajable para cualquier arquero, luego de una asistencia de Quintero a Santos Borré, que dejó la pelota justa para el bombazo del delantero.
En lo que restaba de la tarde, Boca insistió en busca de un descuento que jamás llegó, entre limitaciones propias y alguna intervención notable de Franco Armani, que se lució con una estirada para descolgar del rincón un cabezazo de Mas.
Con mucha solvencia y dosis de oportunismo, River hizo suyo otra vez el superclásico argentino ante un Boca sin luces, nuevamente superado por su eterno rival y sin claridad para torcer un destino adverso casi desde el arranque.
Alineaciones:
Boca Juniors: Agustín Rossi – Leonardo Jara (Edwin Cardona), Carlos Izquierdoz, Lisandro Magallán, Emmanuel Mas – Nahitan Nández, Wilmar Barrios, Agustín Almendra – Carlos Tevez (Mauro Zárate), Darío Benedetto (Sebastián Villa) y Cristian Pavón. DT: Guillermo Barros Schelotto.
River Plate: Franco Armani – Gonzalo Montiel, Jonathan Maidana, Javier Pinola, Milton Casco – Leonardo Ponzio, Enzo Pérez (Bruno Zuculini) – Lucas Pratto (Ignacio Scocco), Exequiel Palacios, Gonzalo Martínez (Juan Fernando Quintero) – Rafael Santos Borré. DT: Marcelo Gallardo.
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