"Creemos que era incapaz de volar", explicó Paul Scofield, el curador jefe del Museo de Canterbury.
Los restos de un loro gigante que medía cerca un metro, pesaba hasta 7 kilos y vivió hace 19 millones de años fueron descubiertos en Nueva Zelanda, según un estudio de un equipo internacional de paleontólogos publicado este miércoles (07.08.2019).
El loro extinto fue bautizado con el nombre de Heracles inexpectatus, en alusión al dios-héroe de la mitología griega (Hércules, en la romana) de extraordinaria fuerza y lo inesperado de su hallazgo, según un comunicado de la Universidad de Nueva Gales del Sur (UNSW, siglas en inglés) con sede en Sídney.
Huesos encontrados en 2008
Los científicos se basaron en el estudio de los huesos de una pata, encontrados en 2008. En ese entonces, nadie sabía mucho qué significaba ese hallazgo, que quedó 11 años en una estantería hasta que se interesaron en investigarlos este año.
“La idea de que se tratara de un loro gigante no se nos había ocurrido. Pensábamos que era una especie de águila hasta que lo examinamos de nuevo”, señaló Scofield.
“Hércules, el loro más grande conocido, tenía sin duda un pico enorme que podía abrir en dos todo lo que quería, y pudo haber comido algo más que lo habitual, incluso otros loros”, explicó Mike Archer, de Centro de Investigaciones de Paleontología de la universidad de Nueva Gales del Sur.
Heracles fue descubierto cerca de la localidad de St Bathans, en el extremo meridional de la Isla Sur neozelandesa entre fósiles que datan de hace 19 millones de años. El yacimiento, que es conocido por alojar fósiles de aves del período del Mioceno, es la única ventana a un hábitat prehistórico con animales y pájaros terrestres que poblaron Nueva Zelanda desde que los dinosaurios habitaron la tierra hace 66 millones de años.
“Hemos excavado este yacimiento de fósiles durante 20 años y cada año se encuentran nuevas aves y otro tipo de animales”, indicó el paleontólogo Trevor Worthy, de la Universidad de Flinders, en Australia.
El año pasado, los científicos descubrieron los restos fosilizados de un murciélago que vivía hace entre 16 y 19 millones de años. Tenía tres veces el tamaño de un murciélago contemporáneo, pesaba 40 gramos, volaba pero también caminaba a cuatro patas.
Con información de: Deutsche Welle