La 14ª Enmienda de la Constitución estadounidense le garantiza la ciudadanía a todas las personas nacidas en territorio estadounidense, pero este principio de derecho de suelo ha sido puesto en duda por el presidente estadounidense, Donald Trump.
Esta Enmienda fue aprobada en 1866 por el Congreso después de la sangrienta Guerra Civil entre los estados del Norte y los confederados del Sur, que defendían la esclavitud.
“Todas las personas nacidas o naturalizadas en Estados Unidos, están sujetas a su jurisdicción, por lo tanto son ciudadanos de Estados Unidos y del estado en el que residan”, reza la enmienda.
Trump dijo en una entrevista difundida este martes que pensaba firmar un decreto para que los niños nacidos en territorio estadounidense de padres inmigrantes en situación irregular, no se beneficien más de ese derecho.
“Somos el único país del mundo donde, si una persona llega y tiene un bebé se convierte en ciudadano de Estados Unidos (…) con todos los beneficios”, afirmó en la entrevista. “Es ridículo, es ridículo, y se tiene que terminar”, agregó.
Los académicos dudan que el presidente tenga las facultades para hacer una reforma de este tipo con una orden ejecutiva, pero Trump asegura que tiene los poderes.
“Siempre me dijeron que se necesita una enmienda constitucional. ¿Adivina qué? No es así”, señaló Trump.
“Está en proceso. Se va a hacer con un decreto”, aseveró el mandatario.
“Esto es un atentado plenamente anticonstitucional para agitar la retórica incendiaria de odio contra los inmigrantes días antes de las elecciones”, estimó la organización en referencia a las elecciones de mitad de mandato que se celebran el 6 de noviembre, en las cuales el discurso contra la inmigración ha sido un eje central de la campaña de Trump.
El tema del derecho de suelo ya ha sido objeto de estudio en la Corte Suprema y el proceso de 1898 “Estados Unidos contra Wong Kim Ark” merece una mención especial.
Wong Kim Ark había nacido en California en 1873 de padres chinos que habían emigrado a Estados Unidos. En 1895 las autoridades le impidieron el reingreso a Estados Unidos después de un viaje a China, argumentando que su caso entraba dentro de una legislación que impedía la entrada a trabajadores chinos.
Sin embargo, la Corte Suprema falló en su favor y dijo que estas leyes no se aplicaban a su caso, ya que Wong Kim Ark era un ciudadano estadounidense por haber nacido en Estados Unidos.
La historiadora Martha Jones, autora del libro “Derecho por nacimiento: La Historia de la raza y los derechos en el Estados Unidos de la preguerra”, indicó que la Casa Blanca puede intentar forjar un argumento para justificar que se eluda el fallo y la enmienda misma.
La 14º Enmienda no se aplica a personas que no están sujetas a la jurisdicción estadounidense, por ejemplo los diplomáticos extranjeros.
Jones dijo en Twitter que la Corte Suprema puede establecer distinciones con respecto al caso de Wong Kim Ark..
“Los padres de Wong tenían autorización o podríamos decir que eran migrantes legales. Su presencia en Estados Unidos estaba autorizada”, explicó argumentando que el caso Wong Kim Ark no hablaba específicamente de los hijos de padres indocumentados.
En este punto Jones indicó que lo que Trump propone es interpretar la parte de la 14º Enmienda que excluye a las personas que no están sujetas a la jurisdicción estadounidense de la ciudadanía por derecho de nacimiento.
“Su postura, como yo lo interpreto, es que los niños de inmigrantes ilegales están excluidos del derecho de nacimiento por esta excepción”, agregó.
Para la experta, aunque esto se apartaría de los precedentes de la Corte, es una posibilidad.
El vicepresidente estadounidense Mike Pence se expresó en este sentido este martes en un foro organizado por el medio de comunicación Político.
“Todos valoramos el lenguaje de la 14º Enmienda, pero la Corte Suprema de Estados Unidos nunca se ha expresado sobre si el lenguaje de la 14º Enmienda ‘sujetas a la jurisdicción’ se aplica específicamente a personas que están de manera ilegal en el país”, indicó Pence.
El senador republicano, Lindsey Graham, un aliado muy cercano a Trump, dijo que Estados Unidos es uno de los dos únicos países desarrollados que otorga la ciudadanía por derecho de suelo y que esta política es un imán para la inmigración ilegal, por lo que anunció que lanzará un proyecto de ley en el mismo sentido que la propuesta del mandatario.
El sistema de “Ius soli”, que se usa en la mayoría del continente americano, es la legislación vigente en más de 30 países.
Según un estudio Pew Research Center, cerca de 275.000 niños hijos de indocumentados nacieron en Estados Unidos en 2014, cerca de un 7% del total.
Con información de: © Agence France-Presse