La mujer estuvo prófuga durante dos años luego de que la condenaron por desnudar, atar y lanzar al fuego vivo a su bebé.
Natalia Guerra fue detenida por la policía luego de estar prófuga por dos años al ser acusada de parricidio, al matar a su bebé de cuatro meses.
Los detalles del macabro asesinato se explican como un “ritual satánico”.
Guerra pertenecía a una secta en la localidad de Colliguay, en la región costera de Valparíso, Chile. Según las investigaciones de la policía, los miembros del círculo de la mujer consideraron al bebé como un “anticristo” y por eso ella desnudó a su recién nacido, lo ató y lo amordazó antes de lanzarlo vivo al fuego.
Detectives de la Brigada de Investigaciones Policiales Especiales (Bipe) detuvieron a Natalia Guerra, quien mantenía una orden de aprehensión por parricidio y se encontraba prófuga de la justicia desde hace más de dos años. #InvestigarEstáEnNuestroADN pic.twitter.com/i9tiZxsBAa
— PDI Chile (@PDI_CHILE) July 9, 2019
La mujer fue condenada a cinco años de prisión sin ningún beneficio, pero logró huir de la justicia y permaneció prófuga por dos años. Las autoridades la encontraron en una pequeña parcela de la Isla de Maipo.
El líder de la secta era Ramón Castillo, un hombre que utilizaba el seudónimo de “Antares de la Luz“, el mismo nombre que le puso al grupo y que fue encontrado sin vida en 2013 en una zona aislada en la ciudad peruana del Cuzco.
La misma pena a Guerra había recaído en Pablo Undurraga, brazo derecho de Ramón Castillo, que ordenó el crimen y posteriormente huyó a Perú, donde se suicidó en la ciudad de Cuzco cuando estaba cercado por la Policía de ese país.