La generosidad de este muchacho enterneció a comunidades de Florida y Carolina del Sur.
Jermaine Bell, de 7 años, rompió su alcancía para comprar hotdogs, agua y papalinas a afectados por el huracán Dorian en Carolina del Sur, y ese gesto de generosidad le será recompensado con creces.
El pequeño había ahorrado con la ilusión de poder ir a Disneylandia, en Orlando, pero cambió de planes cuando vio el sufrimiento de afectados por el meteoro en Carolina del Sur, donde vive su abuela.
Se las ingenió para comprar la comida y regalarla afuera de la casa, donde había un rótulo que decía que todo era gratis para los damnificados.
La historia del pequeño se transmitió por los noticieros locales y Disney lo recompensará con viaje VIP al lugar que tanto ha soñado visitar.
Este es el momento en el que Jermaine vio recompensada su solidaridad.