Twitter dijo que suspendió 274.460 cuentas entre julio y diciembre de 2017 "por violaciones relacionadas con la promoción del terrorismo"
Twitter dijo el jueves que ha suspendido más de un millón de cuentas que hacían “apología del terrorismo” desde 2015. Además aseguró que sus esfuerzos han comenzado a hacer de la plataforma “un lugar indeseable” para llamar a la violencia.
En su último informe de transparencia, Twitter dijo que suspendió 274.460 cuentas entre julio y diciembre de 2017 “por violaciones relacionadas con la apología del terrorismo”.
La cifra bajó un 8,4% respecto al período del informe anterior y es la segunda disminución consecutiva, dijo un comunicado de la red social.
“Seguimos viendo el impacto positivo y significativo de años de trabajo arduo para hacer de nuestro sitio un lugar indeseable para quienes buscan hacer apología del terrorismo, lo que hace que este tipo de actividad se aleje cada vez más de Twitter”, agregó el comunicado.
Twitter ha tenido que hacer frente al desafío de responder a la presión de gobiernos para que tome medidas enérgicas contra yihadistas y otras personas que usan la plataforma para incitar a la violencia, al tiempo que mantiene el respeto a la libertad de expresión.
En el último informe semestral, Twitter dijo que 93% de las cuentas suspendidas fueron “identificadas por herramientas internas”, contra 0,2% que lo fueron atendiendo a solicitudes de gobiernos. Además, 74% fueron eliminadas antes de su primer tuit.
Twitter aprovechó el reporte para expresar inquietudes sobre lo que denominó “amenazas legales a la libertad de expresión” en línea en países de todo el mundo.
“Con la aprobación de nuevas legislaciones y las discusiones actuales sobre las regulaciones que están teniendo lugar en el mundo sobre el futuro del discurso público en línea, vemos un efecto potencialmente disuasivo sobre la libertad de expresión”, dijo la red social.
Citó un estudio de Human Rights Watch que sugiere que “los gobiernos de todo el mundo buscan cada vez más restringir la palabra en línea obligando a las redes sociales a actuar como censores”.