La municipalidad, que planificó gastar Q260 mil en todo el proyecto, anuló la compra de gramilla artificial y materiales de construcción.
El alcalde de Escuintla, Edgar Abraham Rivera Estévez, ordenó dar marcha atrás a la construcción de una cancha sintética de 528 metros cuadrados –en la que invertiría Q260 mil–para los vecinos que perdieron su casa y familia tras la erupción del volcán de Fuego, ocurrida hace un mes.
La decisión la tomó luego de que el proceso fuera cuestionado y que la Contraloría anunciara que enviaría un auditor a verificar la contratación por no considerarlo un gasto de emergencia.
La municipalidad anunció que recurrirá al proceso de cotización que establece la Ley de Contrataciones para adquisiciones mayores de Q90,000.
La alcaldía decidió construir esta cancha sintética para las familias que se encuentran albergadas en la finca La Industria, bajo el argumento de que necesitaban un lugar para recrearse, y recurrió a la figura del Estado de Calamidad. Es decir, contrató sin cotizar ni recibir ofertas a la empresa AC Print + Grass para este proyecto. En un primer concurso destinó Q122,921.20 para adquirir la gramilla artificial.
La adjudicación se realizó el 3 de julio a las 11 de la noche. Una hora antes subió otros dos concursos a Guatecompras registrados con los NOG 8466084 y 8466041. Las compras , que se encuentran en evaluación, están destinadas para adquirir materiales como cemento y focos, también por el campo de fútbol.
De acuerdo con Edwin Carcuz, director municipal de Planificación, estas serían adjudicadas a la misma empresa, cuyo representante legal es Caroll Eunice Fuentes Gómez.
Esta compañía, localizada en Mazatenango, Suchitepéquez, no registra otros contratos mayores a Q90 mil. En su historial como proveedor destacan 42 compras de baja cuantía con la comuna de Samayac, por concepto de impresiones y copias. Jocopilas la ha contratado para arreglar un camino o rehabilitar una fosa séptica. A Río Bravo le vendió urea para el estadio municipal.
En Guatecompras, la actividad económica que la describe es “venta al por mayo de materias primas agropecuarias y animales vivos”.
La obra se localizará en la colonia La Industria de la localidad. El terreno es propiedad de la municipalidad de Guatemala, donde esta habilitó un albergue para un aproximado de 600 vecinos perjudicados por la tragedia.
Carcuz defiende la construcción de la cancha pues la considera importante para los damnificados. “Lo que nosotros vemos es que ellos no van a estar albergados en un corto tiempo, sino un año y medio como mínimo. Por eso se propuso este proyecto como una manera de crearles una fuente de recreación y rehabilitación (tras la tragedia)”, responde a Ojoconmipisto.
En total, la alcaldía planifica invertir Q260 mil para los materiales, gramilla y mano de obra. Pero ahora lo hará con otro procedimiento por ser mayor de Q90,000. Es decir, publicará en Guatecompras el concurso para que otras empresas coticen.
El Estado de Calamidad (decreto 14-2018) fue aprobado por el Gobierno y ratificado por el Congreso por un periodo (3 de junio al 3 de julio) para realizar compras por la emergencia por el volcán de Fuego en los departamentos de Escuintla, Chimaltenango y Sacatepéquez. Esta semana el Organismo Ejecutivo lo prorrogó por un mes más.
La diputada Nineth Montenegro apoya que se prorrogue esta medida, sin embargo, indicó que su bancada Encuentro por Guatemala presionará más a la Contraloría para que fiscalice cualquier anomalía por las compras bajo esta modalidad.
Cesar Elías, subcontralor de la Calidad del Gasto de la Contraloría General de Cuentas, indicó a Ojoconmipisto que enviaría a un auditor para verificar si la comuna de Escuintla incurrió en alguna anomalía.
“Lo que nosotros haríamos es verificar si ellos (la municipalidad) realizaron esa contratación bajo el amparo del Estado con el propósito de evadir los mecanismos de la Ley de Contrataciones. Seguramente, si los auditores comprueban esto, formularán un hallazgo”.
“El Estado de Calamidad debe sustentar aquellas adquisiciones para atender la emergencia, una cancha deportiva a nuestro criterio no lo es. Puede planificarse este tipo de compras a mediano plazo, no estamos en contra de la recreación, pero hay situaciones emergentes como la compra de medicamentos”, agregó.
Elías agregó que aunque la Contraloría tenga un equipo especial para auditar al gobierno central, este jueves 5 de julio enviará a un auditor para supervisar la contratación de la cancha y a partir de eso decidir sobre qué acciones emprender.
Esto ya no será necesario porque la municipalidad de Escuintla dio marcha atrás.