La Comisión Económica para América Latina y El Caribe (Cepal) reveló las cifras por pérdidas causadas por la erupción del Volcán de Fuego. Los resultados ascienden a Q926.1 millones en daños, por pérdidas Q468.1 millones y por costos adicionales Q247.3 millones, para un total de Q1 mil 642 millones.
La Comisión Interagencial empezó a mediados de junio con el proceso de levantamiento de información en campo, con el fin de hacer el cálculo de las pérdidas, cuantificar los daños, así como del proceso de reconstrucción y sus costos.
Miguel Ángel Moir, jefe de la Secretaría de Planificación y Programación de la Presidencia (Segeplán), resaltó que una vez cuantificado el total de las pérdidas se procederá a la recuperación de los medios de vida y producción de las personas damnificadas, sobre todo en vivienda, que es el principal activo de las familias.
La evaluación estuvo a cargo de Omar D. Bello quien presentó los siguientes resultados:
“Fue un análisis y es una estimación piso, por lo que el informe tuvo ciertos atrasos por situaciones de la propia emergencia”, dijo el especialista de la Cepal.
Moir de Segeplan refirió en junio pasado que los resultados serían la base para empezar con el proceso del plan de recuperación con transformación y definir los criterios de intervenciones por cada ministerio en sus áreas.
El equipo técnico fue liderado por Omar D. Bello, coordinador de la Unidad de Desarrollo Sostenible y Evaluación de Desastres de la Cepal, a solicitud del Gobierno de Guatemala.
La Comisión fue conformada por 75 personas, entre especialistas de organismos internacionales y técnicos de varias instituciones estatales que harán la medición en Sacatepéquez, Chimaltenango y Escuintla.
Karin Slowing, exjefa de Segeplan, indicó que cada evaluación de una catástrofe natural tiene un proceso diferente de medir y que lleva un tiempo determinado.
“No es lo mismo hacer un recuento de daños y pérdidas por un huracán, una inundación, un terremoto o una erupción”, dijo.
Recordó que en la erupción uno de los riesgos son los lahares —deslizamientos de tierra— que pueden representar un peligro para los técnicos y podría ser que a eso se deba el retraso del informe de daños y pérdidas.
En junio, el Consejo Científico de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) declaró como inhabitables la comunidad de San Miguel Los Lotes, Escuintla y la finca La Reunión, Sacatepéquez.
Con esa medida se adoptarán las decisiones para la fase de reconstrucción, según Moir. En la resolución de Conred se determinó cuáles son las áreas propensas a sufrir descensos de lahares y flujos piroclásticos, y que se recomiendan ser declaradas inhabitables.
También se identificó que 172 comunidades cercanas al volcán son áreas de alto riesgo, lo que se considerará en la reconstrucción.