Un mes después del asalto en dos joyerías del centro comercial La Pradera, zona 10, los representantes de los negocios afectados reportaron pérdidas millonarias, en tanto la investigación continúa.
La noche de 16 de marzo, un grupo armado cometió el “mayor” asalto a un centro comercial registrado hasta ahora en el país, según las autoridades.
Luis Archila, jefe de la Fiscalía Metropolitana del Ministerio Público (MP), informó que hace unas semanas las joyerías EnHora y FS Richard entregaron la auditoría que hicieron en las tiendas para verificar el monto de los artículos y el valor de lo que se llevaron.
El reporte, que fue entregado a la fiscalía, establece que la suma de los artículos que hurtaron de las tiendas asciende a Q15.5 millones.
“EnHora reportó que el monto del robo fue de Q13 millones 395 mil, mientras que FS Richard aseguró que fue de Q2 millones 261 mil”, declaró Archila.
El fiscal afirmó que agentes continúan en análisis de las pesquisas que recolectaron el día del incidente y el estudio de las imágenes de las cámaras instaladas en el centro comercial.
La noche del pasado 16 de marzo, al menos 16 hombres armados y con gorros pasamontañas asaltaron las dos joyerías después de que ingresaron al cine. La noche anterior, seis de ellos habían comprado los boletos para ver una película con sus novias.
Los delincuentes utilizaron martillos y otras herramientas para romper los vidrios y entrar a los comercios. Los asaltantes se dividieron en dos grupos y robaron las tiendas de manera simúltanea durante unos 40 segundos.
El centro comercial dijo que la seguridad no pudo retener a los delincuentes debido a que había muchas personas en el recinto e intentar coparlos pudo haber puesto en riesgo la seguridad de los visitantes e inquilinos.
Asimismo, el comercial descartó que haya habido personas heridas y aseguró que estaba colaborando con las autoridades en la investigación para dar con el paradero de los responsables.
La joyería EnHora lamentó “el alto grado de vulnerabilidad y exposición que se tiene dentro del centro comercial La Pradera, lo cual debe ser motivo de mucha preocupación para sus administradores, así como para toda la clientela, trabajadores, operarios y personas que visitan dicho lugar”.
Calificó de “inaudito” que los asaltantes pudieron bajar desde el segundo nivel del comercial hasta el sótano “sin que se les hiciera resistencia alguna”. La joyería aseguró que el local quedó prácticamente destruido en su interior.
Por su parte, la relojería FS Richard rechazó “firmemente” lo que calificó como “un acto de bajeza”. Señaló que espera la pronta detención de los asaltantes.
Días después del suceso, el ministro de Gobernación, Enrique Degenhart, dijo “que la forma de operar (de la banda) es atípica a las estructuras que operan en el país” y que ya estaba en comunicación con la Interpol y autoridades mexicanas.
Después el funcionario se retractó y señaló que no podía confirmar el origen del grupo que cometió el atraco, pero que “las operaciones son similares a estructuras que operan en Latinoamérica”.