El presidente Jimmy Morales llegó al restaurante McDonalds en la zona 5 capitalina para participar del McDía Feliz por los niños, donde compró mil hamburguesas para colaborar con la causa.
Al principio el mandatario aseguró a periodistas presentes que compraría 25 o 29 mil Big Macs, al menos ese era el plan inicial: “Hoy estamos decidiendo si compramos 25 o 29 mil Big Macs, vamos a ver hasta dónde nos alcanza la chamarra”, declaró el mandatario según un reporte de La Red.
Finalmente, el presidente sacó su tarjeta de débito y pagó por mil hamburguesas, que según indicó más tarde, serían repartidas entre niños y ancianos “con alguna necesidad”. Morales pidió un menú para comer en el restaurante y compartir con los comensales.
Don Carlos Armas, estaba sentado en una esquina comiéndose su Big Mac cuando de pronto llega su vecino de mesa, nada más y nada menos que el presidente Jimmy Morales acompañado de camarógrafos, fotógrafos, guardias de seguridad, periodistas y funcionarios gubernamentales.
Morales se sentó al lado del señor y lo saludó. El ciudadano, aprovechó el momento para cuestionarle sobre algunos problemas nacionales y Morales le respondió que trataba de fijar prioridades para que la cantidad de problemas a resolver fueran cada vez menos.
El señor Armas, dijo entender la situación y lo que costaba hacerlo con recursos limitados y comenzó de nuevo a enumerar problemas de país, ríen un poco y el presidente opta por cambiarle de tema y pedirle que desayune para luego, terminar de la charla.
El mandatario saluda a quienes lo rodean pero no platica con nadie pues su Secretario de Comunicación, Alfredo Brito, quien lo acompaña a la mesa, habla por teléfono celular. Morales juega con los dedos en la mesa a la espera de sus alimentos, un silencio evidentemente incómodo para él.
Más tarde, el señor nuevamente intenta entablar comunicación con Morales, hasta le comparte azúcar y removedor para su café, lo logra pero ya no hablan de política y mejor se toman una fotografía. Morales pregunta a reporteros y otras personas que estaban a su alrededor si ya habían desayunado y ofreció invitarles a un Big Mac.