Los subibajas estuvieron instalados un par de horas, pero los artistas que cambiara el rostro a un lugar tan hostil.
Este lugar que se ha llenado de llantos de familias que se separan, se convirtió en un punto de juego y encuentro gracias a la iniciativa de dos profesores de California, Estados Unidos, quienes lograron cambiarle el rostro a este muro fronterizo.
Los profesores y arquitectos Ronal Real, de la Universidad californiana de Berkeley, y Virgina San Fratello, de la Universidad de San José decidieron dar una respuesta contundente al presidente Donald Trump con tres subibajas que fueron instalados a través del muro fronterizo entre México y Estados Unidos.
Trump mantiene el plan de construir un muro a lo largo de 3.200 kilómetros limítrofes entre los dos países y mientras lo logra, está llevando a cabo una serie de políticas que criminaliza a los migrantes.
“El muro se convirtió en un punto de apoyo literal para las relaciones entre Estados Unidos y México y los niños y adultos se conectaron de manera significativa en ambos lados, entendiendo que las acciones en un lado tienen una consecuencia directa en el otro”, agregó Rael.
Los subibajas estuvieron instalados un par de horas, pero los artistas lograron el cometido de que la gente que vive en una zona de constante tensión se trasladara con la imaginación a otro lugar.