El Ministerio de Educación (Mineduc) informó al final del ciclo escolar que se había cumplido con más de 180 días de clases, cifra que contrasta con la de un monitoreo que reporta 176 días. Además se señaló que la principal causa de cerrar escuelas fue las manifestaciones por los pactos colectivos.
Empresarios por al Educación y Mejoremos Guate presentaron los resultados del monitoreo de días de clases realizados las escuelas públicas del país, donde se evidenció que pese a que se mejoró con el año anterior la meta de asistencia a clases no se cumplió.
El pasado 25 de noviembre el presidente Jimmy Morales aseguró que “por primera vez en la historia los niños habían asistido a 188 días”, un dato que contrasta con los resultados presentados por el grupo que segura que fueron 176 días de clases. El mínimo de días de clases establecido es de 180 días.
La muestra se recolectó del 8 de enero al 22 de noviembre de 2018, donde se recibieron 122,920 reportes de 823 centros educativos localizados en 18 departamentos.
Abril, mayo y junio fueron los días donde se presentó el mayor porcentaje de incumplimiento en los días de clases, el principal motivo para no cumplir con las metas en el sistema educativo fueron las huelgas magisteriales que representaron el 37.8% y luego las reuniones de maestros con un 12.8%.
Los empresarios también señalaron que los resultados del Programa para la Evaluación Internacional de los estudiantes (PISA) reflejan grandes desafíos para el país principalmente porque para mejorar la educación se necesitan recursos, pero que actualmente más del 80% del presupuesto destinado al Ministerio de Educación se destina para pagar salarios de maestros por los pactos colectivos.
Según lo indicado por Empresarios por la Educación el aumento para los maestros es merecido debido a que son los pilares de la educación pero deben darse por meritocracia, pero no por pactos colectivos que no dan mejoras medibles en la calidad de la educación.
El grupo propone un nuevo pacto por la educación que lo que busca es que se generen condiciones ordenadas, para los incrementos que vayan “amarrados” por meritocracia.