La falta de oportunidades y la inseguridad llevó a un hombre de Villa Canales junto a su hijo a emigrar a Estados Unidos. Ahora la aventura del papá se ha convertido en la búsqueda para reencontrarse.
Sentado en la sala de espera del Consejo Nacional de Atención al Migrante (Conamigua), un hombre con la mirada perdida y con la voz preocupada pide apoyo para localizar a un hombre al que el 6 de diciembre le pidió auxilió y a quién expuso su caso. Ese día había llegado en un vuelo de deportados provenientes de Estados Unidos.
Jesús Sánchez tiene 42 años y es padre de 4. El pasado 10 de noviembre salió de su casa en Villa Canales junto a su hijo Joshua Rocael rumbo a Estados Unidos tratando de alcanzar “el sueño americano”, el cual se ha convertido en una pesadilla.
El 21 de noviembre ambos fueron detenidos por agentes de la patrulla fronteriza en McAllen, Texas. Y aunque fueron encerrados la primera vez juntos, luego Joshua fue separado. Desde ese momento, don Jesús no supo nada más de su hijo.
La falta de oportunidades laborales obligó a emigrar a don Jesús que trabajo por años como guardia de seguridad. Su hijo cursaba 4.to Bachillerato en Estructuras Metálicas cuando decidió sumarse al viaje huyendo de un grupo que lo quería reclutar para una pandilla.
Mientras estaba detenido le ofrecieron ser deportado o quedarse a pelear por su caso pero debía pagar 8 mil dólares, por lo que escogió la primera opción.
Jesús llegó al país el pasado 6 de noviembre en un vuelo de deportados y desde ese día ha buscado ayuda, pero luego de ir a varias instituciones lo refirieron a Conamigua donde 8 días después de pedir ayuda nadie le da respuesta alguna.
De enero al 12 de diciembre de este año han sido deportados 85,779 guatemaltecos desde Estados Unidos y México, según datos de la División de Operativos, de la Dirección General de Migración y la Secretaría de Bienestar Social.