Si en la Consulta Popular gana el "No" el resultado sería un impasse diplomático para el país.
En el escenario de que se votará el No, el país va a tener que buscar ese mecanismo legal, y ese mecanismo puede ser desde la misma repetición de la consulta hasta buscar, en el caso de Guatemala, reformar la Constitución, cosa que no es viable; o en Belice, conseguir una aprobación parlamentaria, porque a diferencia de Guatemala, en Belice no exigen una consulta popular.
En 2008, Guatemala y Belice acordaron ir a la Corte Internacional de Justicia para poner fin a la controversia de más de dos siglos. Guatemala dará el primer paso con la consulta de este domingo mientras que Belice aún no ha fijado una fecha para su referendo, aunque las autoridades han dicho que podría ser el próximo año.
Al menos siete millones de guatemaltecos están habilitados para ir a votar en la consulta popular sobre el diferendo territorial con Belice. Para ello el TSE elaboró 7 millones 625 mil boletas impresas que fueron embaladas junto con los materiales para las mesas son enviadas a los distintos centros electorales en todo el país.
A los Q300 millones que costará la consulta popular por el diferendo territorial, insular y marítimo con Belice se suman hasta Q80 millones que podría costarle al Estado el pago de abogados internacionalistas y litigantes que representen al país ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ).
Con información de: Eslly Melgarejo.